El desempleo en EE. UU. hace caer las bolsas
Las bolsas de EE. UU. y Europa cayeron después de que se conocieran las cifras del Departamento de Trabajo norteamericano. El informe divulgado el viernes señaló que en agosto no se crearon nuevos empleos, en comparación con los 85.000 puestos de trabajo creados en julio. La tasa de desocupación se quedó, así, al nivel del 9,1%, unos 14 millones de estadounidenses.
La noticia reanimó los temores de una nueva recesión en el país, lo que no tardó en afectar los mercados de valores. El dólar creció frente al euro, pero perdió ante el yen nipón y la libra británica. Los tres índices han tenido su peor pérdida en las últimas dos semanas.
El Dow Jones bajó un 2,2%, el Bank of America cayó en un 8% y JPMorgan Chase descendió en más del 4%. The S&P 500 (SPX) perdió 30 unidades, lo que equivale al 2,5%, mientras que Nasdaq Composite (COMP) cayó en 66 unidades (un 2,6%).
En cuanto a los mercados europeos, en la Bolsa de Londres el índice FTSE 100 cayó un2,3%, DAX en la Bolsa de Fráncfort bajó un 3,4% y CAC perdió el 3,6% en la Bolsa de París.
Las bolsas asiáticas también se han visto afectadas, aunque han reaccionado de una manera más 'moderada'. El SSE Composite Index en la bolsa de Shanghái cayó en un 1,1%, Hang Seng de Hong Kong perdió un 1,8% y el Nikkei 225 japonés bajó un 1,2%.
Según los expertos, EE. UU. tiene que añadir unos 150.000 puestos de trabajo mensuales para mantenerse al día con el crecimiento de la población activa. Teniendo en cuenta que el país debe recuperar, además, los millones de empleos perdidos durante la crisis financiera, necesita un progreso aún mayor.
El próximo jueves el presidente Barack Obama se dirigirá a ambas cámaras del Congreso con su plan de fomento del empleo. El lunes pasado el mandatario designó como presidente del Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca a Alan Krueger, profesor de la Universidad de Princeton y especialista en relaciones laborales e industriales. Krueger es autor de numerosas investigaciones de mercados de trabajo. Entre los años 1994 y 1995 trabajó como economista jefe en el Departamento de Trabajo y, un tiempo, como economista jefe del Departamento del Tesoro durante el mandato de Obama.