La crisis de la zona euro se ha convertido en un dolor de cabeza universal que no da tregua a los líderes mundiales desde hace unos años. ¿Existe un remedio para impedir nuevas recesiones?
Los líderes mundiales se oponen a la crisis
En la cumbre del G-20 en Cannes, los líderes de los países participantes tendrán que buscar respuestas ante la nueva amenaza de crisis financiera y económica mundial.
El anfitrión de la cumbre, el presidente francés Nicolas Sarkozy, ha formulado tres prioridades de la reunión: la modernización del sistema financiero, medidas para evitar grandes fluctuaciones en los mercados de materias primas y la mejora de la eficiencia del funcionamiento del G-20. Además se deliberarán entre otras cuestiones: la lucha contra el terrorismo, la reforma en los países del norte de África y Oriente Medio y el programa nuclear iraní.
Como se desprende del comunicado de la reunión, el tema del control total sobre los mercados financieros se convertirá en uno de los principales temas. El proyecto ofrece un paquete de medidas, incluyendo una mayor vigilancia, así como nuevas normas internacionales para las instituciones financieras.
La supervisión financiera global, ¿un fenómeno negativo o positivo?
Los analistas, sin embargo, se muestran escépticos sobre los planes para fortalecer la supervisión del sistema financiero global. Según el economista jefe de Barclays, Thorsten Polleit, este plan es la intervención del gobierno en los asuntos de la industria.
"La influencia del Estado en el sistema de crédito y monetario ya es demasiado grande. Si las autoridades siguen restringiendo la libertad de los mercados, llevará a un aumento del número de eventos que son perjudiciales no solo para el sector financiero, sino también para la economía real”, dijo el economista citado por 'RBC Daily'.
Otro tema, que seguramente estará sobre el tapete del G-20, es la ayuda a los países con problemas en la zona euro. Hasta hace poco, se esperaba que China contribuyera a la salvación de Europa. Sin embargo, como Europa no está dispuesta a hacer concesiones políticas y económicas a Pekín, a cambio de inversiones en el fondo de estabilización, las negociaciones sobre este tema aún no se han llevado a cabo.
El apoyo puede venir de Moscú. De acuerdo con el asesor presidencial Arkadi Dvorkóvich, si los países europeos se lo piden, Rusia está dispuesta a considerar la cuestión.
Una cumbre acompañada de masivas protestas
Mientras tanto, manifestantes del movimiento antiglobalización y anticapitalista están planeando protestas masivas en Cannes, a pesar del despliegue de seguridad para mantenerlos fuera.
Varias organizaciones han pedido que los manifestantes se movilicen en Niza, dos días antes de la apertura de la cumbre, que se llevará a cabo el 3 y 4 de noviembre.
Los grupos dijeron que están planeando una "gran protesta anti-cumbre y una acción en la frontera de Mónaco" para protestar contra la desigualdad.