¿Qué opinan los líderes del G-20 sobre la crisis europea?
Los líderes del G-20 inauguraron el jueves la cumbre en Cannes, con la crisis de Grecia en el centro de la escena, teniendo en cuenta que puede tomar un giro inesperado tras la decisión del país de convocar un referendo para que los griegos decidan si aceptan permanecer en la zona euro y el paquete de ayuda, elaborado por Bruselas hace una semana.
Rusia: el mundo espera "buenas noticias de Grecia y no noticias exóticas o populistas"
En un discurso pronunciado ante empresarios de los países del G-20 el presidente ruso, Dmítri Medvédev, ha aludido a la incertidumbre en que se encuentra la eurozona tras el sorpresivo anuncio de un referendo en Grecia sobre el plan europeo de ayuda a ese país.
"Todo el mundo espera, por supuesto, buenas noticias de Grecia; buenas y no exóticas y populistas", afirmó el mandatario, manifestando su confianza en que "no tengamos que esperarlas demasiado tiempo".
Medvédev estima que los países europeos no avanzan lo suficientemente rápido en las medidas para luchar contra la crisis de la deuda y contra sus déficits presupuestarios y considera la situación en la eurozona como el "problema más agudo actualmente".
Además, recordó que Rusia participará en "programas de ayuda financiera a los países de la Unión Europea, al menos a través del FMI".
Obama: la tarea más importante del G-20 "es resolver la crisis de la eurozona"
El presidente de EE. UU., Barack Obama, llega a la cumbre con una misión delicada: quiere presionar a los europeos para que tomen decisiones rápidas pero al mismo tiempo debe evitar dar la impresión de querer dar lecciones, algo que en el pasado ha causado gran irritación entre los aliados del Viejo Continente.
Inmediatamente tras su llegada a Cannes, Obama se reunió con los líderes de las principales economías de la eurozona, el jefe de Estado francés, Nicolás Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel.
En el marco de la cumbre, EE. UU. insistió en la necesidad de que Europa decida los detalles de su plan contra la crisis de la deuda y los ponga en práctica lo antes posible para evitar un contagio de la situación griega.
Obama subrayó que es necesario poner en marcha cuanto antes el plan aprobado por los países del euro la semana pasada, "de manera efectiva para garantizar no solo la estabilidad de la eurozona, sino la del sistema financiero".
Para la Casa Blanca resolver la crisis y tranquilizar a los mercados es una cuestión de absoluta prioridad, ante los efectos que pueda tener en su propia economía, que a duras penas se recupera de la mayor recesión en los últimos 70 años.
Francia: “No se puede aceptar que no se respeten las reglas”
Por su parte, el presidente francés subrayó que trabajan para "erigir la unidad del G20" en la cumbre. Según Sarkozy, Francia está de acuerdo en que el mundo financiero debe contribuir a la resolución de la crisis.
"Deseamos continuar con Grecia pero hay reglas y no podemos aceptar que no se respeten. Europa es demasiado importante para que se juegue con las reglas que hemos adoptado", declaró el mandatario francés.
Rodríguez Zapatero: "Los griegos necesitan un alivio"
El jefe del Ejecutivo español, José Luis Rodríguez Zapatero, ha reconocido ante el G-20 la necesidad de mantener la austeridad y las políticas de consolidación fiscal, pero ha reclamado al mismo tiempo "un plan global de crecimiento" con estímulos para la economía.
Sin olvidar la contestación social en el país, Rodríguez Zapatero ha pedido que se ofrezca a los ciudadanos griegos "un alivio" y "expectativas de futuro", porque si no la situación puede llegar a ser insostenible.
El viernes, la reunión del G-20 se abrirá con una sesión de trabajo en torno a "regulación financiera", a la que luego se sumará otro encuentro en el que los líderes mundiales abordarán las cuestiones referentes a "agricultura, energía y volatilidad de los precios de los productos".