El Ministerio de Asuntos Exteriores de Japón anunció este lunes la suspensión de los pagos para obtener el visado a los extranjeros que decidan visitar las regiones siniestradas por el terremoto y el tsunami del 11 de marzo pasado. La medida tiene como objetivo reactivar el turismo en el país, que quedó también seriamente afectado por los desastres naturales.
El trámite será gratis para aquellos que deseen visitar las tres provincias del noreste del país más afectadas por la catástrofe: Miyagi, Iwate y Fukushima. Dichas medidas de excepción se aplicarán a partir del 15 de noviembre y serán válidas por cinco años.
Para dejar de pagar el equivalente a 3.000 o 6.000 yenes (28-56 euros), los solicitantes del visado deberán mostrar la reserva de avión y hotel u otra prueba de hospedaje o de transporte en la región.
Anteriormente, el gobierno japonés anunció que regalaría a partir del 1 de abril del 2012 10.000 billetes de avión para turistas que deseen viajar a Japón.
El número de visitantes a Japón se ha reducido más del 40 % desde marzo hasta finales de septiembre con relación al mismo período del 2010, lo que empeora las dificultades económicas del país, ya de por sí castigado por depreciación de la moneda japonesa.
El accidente en la central nuclear de Fukushima-1 es la razón principal por la que los extranjeros rechazan viajar a Japón, incluso si las autoridades aseguran que no hay peligro más allá de la zona de exclusión de 20 kilómetros alrededor de la planta averiada.