La creciente tasa de desempleo en España que, con un índice del 22%, es actualmente la mayor en la Unión Europea, hace que los españoles busquen un destino mejor poniendo la mirada en Latinoamérica.
Argentina es uno de los países a donde llegan para aplicar su experiencia profesional en un empleo que responda a sus exigencias de hoy en día. Solo durante 2010 a este país sudamericano emigraron 24.000 españoles.
En la crisis económica de 2001 los argentinos hacían largas filas en las embajadas de España y de Italia para buscar en Europa la posibilidad de progreso que su patria les negaba. Hoy la situación en muchos casos es inversa. Los emigrantes ponen la mirada en las naciones en desarrollo que, aunque aún enfrentan serios problemas, ofrecen un panorama laboral más amplio.
Meritxell Díaz, una periodista de Barcelona que actualmente trabaja en Buenos Aires, llegó al país hace unos dos años, cuando todavía tenía trabajo, pero ya veía que la situación con el empleo en España se iba agravando. “Todos los compañeros míos de la facultad estaban o perdiendo empleo o buscando nuevos empleos o viendo cómo se reducían sus salarios. Entonces en aquel momento, la cosa estaba mal. Ahora que ha pasado un año y ocho meses la cosa está mucho peor", cuenta.
Meritxell, que en principio llegó a Argentina por un año, decidió quedarse sin vacilar cuando le propusieron prorrogar su contrato. “Ahora la tasa de desempleo entre los jóvenes en España es más de un 40%, con lo cual si no hay trabajo allá la gente tiene que irse; sea a Europa, sea a Latinoamérica", señala la periodista.
Los expertos españoles destacan también que el motor de esta ola emigratoria no es solo el dilema de contar con un empleo o estar en la calle, sino las inciertas perspectivas que en este sentido hay en Europa. Así, Verónica Milo, directora de marketing de una empresa de búsqueda de empleo, señala que “el 85% de los licenciados en España está trabajando. Lo que ocurre es que a lo mejor está trabajando en unas condiciones inferiores a lo que podría ser su propia experiencia. Y es por esto que muchos que ahora mismo están trabajando, buscan un desarrollo profesional en otros países". En efecto, hay estados del mundo emergente, como Brasil, donde el sueldo promedio de un ejecutivo puede superar en un 30 o 50% incluso el salario de sus pares estadounidenses.
Por segunda vez después de la primera ola de inmigración española tras la guerra civil, América Latina, y en particular, Argentina, se ha convertido en un salvavidas para los que buscan un empleo y un futuro seguro.