Este lunes el primer ministro británico David Cameron defendió ante el Parlamento estatal su decisión de no unirse a un nuevo convenio presupuestario de la Unión Europea. Aseguró que fue a la reciente cumbre de Bruselas “de buena fe” en busca de un acuerdo con otros países europeos, pero sus propuestas no se correspondían con los intereses del Reino Unido. El documento prevé el fortalecimiento del control sobre el gasto de los fondos presupuestarios y el volumen de la deuda.
Mientras que los círculos políticos tienen discrepancias sobre el curso elegido, varios expertos creen que este paso es correcto pero no suficiente: ahora hace falta salirse totalmente de la Unión Europea.
Aunque la derecha británica apoya la decisión del primer ministro, su veto a la reforma de los tratados de la UE ha abierto las primeras grietas en la coalición de conservadores y liberales-demócratas que gobierna el Reino Unido. Es criticado tanto por su ‘número dos’, el viceprimer ministro Nick Clegg, quien cree que Gran Bretaña va a quedar “aislada y marginada en la Unión Europea”, como por los demás líderes de la UE.
Escisión en Europa
El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, dijo que ahora “existen dos Europas”: una que desea más solidaridad entre sus miembros y otra que solo se interesa por la lógica del mercado único. Sarkozy afirma que él y la canciller de Alemania, Angela Merkel, hicieron todo lo posible para convencer al Reino Unido de que forme parte de la primera, pero sin éxito.
¿Quedarse o no en la UE?
Jon Gaunt, un líder de la campaña Vote UK out of EU ("Vota para sacar al Reino Unido de la UE"), expresa su seguridad en que el pueblo británico quiere salir de la unión. Y las razones están bien claras para él: “Los hechos muestran que ahora estamos más aislados que nunca. El Reino Unido paga 51 millones de libras cada día a la UE, pero no participa en la toma de decisiones ni tiene mucha influencia”.
El activista apoya plenamente las acciones de Cameron: “Alguna gente las consideró demasiado duras, pero yo pienso que ahora tiene que ir todavía más lejos y organizar un referendo y preguntar a la población si quieren formar parte de los Estados Unidos Europeos”. Y no duda de que los británicos van a votar a favor de la salida: "Queremos menos integración, no más". Destaca que las encuestas muestran que alrededor del 53% votaría por salir para que el presupuesto británico no sea controlado por Bruselas.
En opinión de Gaunt, la moneda común europea está condenada: “Creo que vamos a ver el colapso del euro. Ahora hay problemas en Grecia, Irlanda, Portugal e incluso Italia y posiblemente Francia. Por eso opino que la unión fiscal no va a funcionar y hay una gran posibilidad de que el euro colapse y se queme”.