España combate al déficit público, pero el enemigo es el desempleo
Las medidas de ajuste que aplica el nuevo Gobierno español del derechista Mariano Rajoy son en realidad nocivas para la economía del país y para los ciudadanos, porque pretenden luchar contra el déficit presupuestario, mientras que el enemigo es el desempleo, según opinan algunos especialistas.
Mientras la agencia Fitch amenaza con rebajar dos escalones la calificación de la deuda de España, el Gobierno ha decidido aumentar varios impuestos (IRPF e IBI) y servicios básicos, como el gas natural y el agua. Se estima que debido a este ajuste y a su coincidencia con una subida, por parte del Banco Central Europeo, de los tipos de interés que afectan a las hipotecas, cada contribuyente deberá afrontar este año un pago extra de 679 euros (unos 893 dólares).
El presidente de la Fundación Centro de Estudios Políticos y Sociales, Alberto Montero Soler, considera que estas medidas son “inoportunas”. Las autoridades tratan de disminuir el déficit público, pero este “no es un problema relevante” y lo que deberían resolver es el nivel de desempleo. En cambio, las medidas de austeridad “lo único que hacen es agravar la situación de crisis y retraer más el consumo".
El desempleo en España ya supera el 20% y junto a las ejecuciones hipotecarias amenaza con dejar sin su vivienda a más de 500.000 familias hasta 2015. Esto sería una “tragedia social” para España que tiene el "parque inmobiliario vacío más grande de Europa, pero la gente empieza a poblar las calles", lamenta Montero Soler.
En este contexto de descontento popular y numerosas huelgas “es difícil de saber cuál será la respuesta del pueblo”, según avisa Montero Soler. Hasta ahora la reacción de los españoles ha adquirido forma de protestas masivas en torno al movimiento 15-M y a Democracia Real Ya.