Oriente Medio vive una reconfiguración geopolítica que en la próxima década habrá de determinar el equilibrio de poder en la región. Muchas líneas de fuerza convergen ahora en Irán, afirman los expertos.
"De cómo se desarrollarán los acontecimientos en torno a la República Islámica de Irán, y la situación en el mismo Teherán, dependerá mucho y será la consecuencia lógica de un gran número de los actuales conflictos regionales, así como del futuro inmediato del mercado mundial del petróleo", opinan analistas británicos citados por Itar-Tass.
Intentando responder a la pregunta sobre la principal fuerza motriz de los procesos del mundo islámico, los expertos occidentales mencionan la salida de Occidente de esferas tradicionales de su influencia como son África del Norte y Oriente Medio. "Debilitado por la actual crisis financiera, Occidente tiende a preservar en lo posible su antigua influencia en la región, de modo que en el futuro se recupere el terreno perdido", agrega uno de los analistas.
En el actual contexto de quejas recíprocas Teherán cree que "un gesto de buena voluntad" como la cancelación inmediata del embargo sobre las importaciones de petróleo iraní, crearía una atmósfera constructiva en las negociaciones con Occidente.
Los expertos indican que en la situación actual las sanciones internacionales contra Irán no funcionan en la medida en lo que esperaban las naciones occidentales.
"Ciertamente, las medidas adoptadas causan un perjuicio a Irán porque se ve obligado a reducir sus exportaciones de petróleo. Sin embargo, esto se ve compensado por los altos precios del crudo, debido a que Occidente no es capaz de controlarlos”, dijo a 'The Financial Times' el director de la consultoría suiza de energía Petromatrix Oliver Jacob.
Al mismo tiempo, los analistas indican que Irán tiene todas las posibilidades de salir ganando, aunque Arabia Saudí, que prometió cubrir la falta de petróleo en caso del bloqueo de suministros de la república islámica, no tiene capacidad suficientes para hacerlo.
Por lo tanto, el mercado petrolero mundial se encuentra ahora en un período de gran incertidumbre, cuando se puede prever un giro inesperado de los acontecimientos. Es evidente que la planificación de los próximos pasos de Occidente en relación a Irán quedará en gran parte determinada por la evolución del mercado mundial del petróleo y la economía mundial en su conjunto, afirman los expertos.