En tres años Rusia podría adelantar a Gran Bretaña por volumen del PIB
Rusia adelantará a Gran Bretaña por volumen de Producto Interior Bruto (PIB) en 2012, según el pronóstico del Centro Británico de Investigaciones Económicas y de Trabajo (CEBR). Los investigadores analizaron la dinámica del crecimiento económico de Gran Bretaña y de otros países del mundo, partiendo de la conservación de las tendencias actuales en el futuro.
En 2005 Gran Bretaña se encontraba en el cuarto lugar del mundo por el volumen de su PIB después de EE.UU., Japón y Alemania. En 2006 cedió esta posición a China, en 2008 dejó pasar adelante a Francia y en 2009 a Italia (Señala Lenta.ru Rambler Media Group).
Según afirma CEBR, en 2012 no sólo la economía de Rusia, sino la de Brasil, adelantará la británica. En 2015 India y Canadá superarían a Gran Bretaña, con lo que el país abandonaría su puesto entre las diez economías más desarrolladas del mundo.
Actualmente, el PIB de Rusia es considerablemente inferior al británico. En 2008 el volumen de la economía de la Federación Rusa ascendía a 1,67 billones de dólares, mientras que la de Gran Bretaña alcanzaba los 2,68 billones. En 2009, a causa de una fuerte crisis en Rusia, la correlación no cambiará en beneficio de éste país. Según el pronóstico del Fondo Monetario Internacional (FMI), en 2012 tanto Rusia como Brasil se encontrarán todavía por detrás del Reino Unido.
Sin embargo, si se tiene en cuenta el PIB no por el curso de cambio corriente (los resultados pueden oscilar considerablemente en este caso junto con el mercado monetario mundial), sino por la paridad del poder adquisitivo (PPA), la diferencia sería menos abultada: 2,126 billones de Rusia, frente a 2,163 billones de Gran Bretaña en 2009 (según la estimación del FMI).
Gran Bretaña sufrió la crisis global de crédito más que otras economías desarrolladas. El PIB del país se redujo en el tercer trimestre de 2009 a 0,4 % en relación a los datos de los tres meses anteriores, según informaBloomberg. Así, la caída de la economía británica continúa a lo largo de los últimos seis trimestres, lo que supone un récord negativo desde la época en la que comenzaron estos recuentos estadísticos en 1955. El sector financiero del país estuvo al borde de la quiebra y el gobierno tuvo que nacionalizar algunos bancos dominantes. A largo plazo, la economía de Gran Bretaña puede encontrarse con una gran deuda pública, que actualmente está creciendo rápidamente, y con una importante inestabilidad de la libra esterlina.