"Una economía pequeña como puede ser la economía griega o la irlandesa o la portuguesa son rescatables. Un país grande como España o Italia son irrescatables porque haría falta una cantidad monstruosa de dinero que no se tiene", explica el economista Santiago Niño Becerra a RT.
"¿Cuál es el camino? Analizar aquello que es más problemático. En el caso de España esto es la banca", agrega.
Según los cálculos, para la recuperación de la banca española se necesitan unos 40.000 millones de euros que podría aportar el Mecanismo de Estabilidad Europeo. Se espera que la inyección directa de los recursos permita evitar el rescate del país y la aplicación de los ajustes correspondientes.
Pero en la otra cara de la moneda un rescate supondría una pérdida de autonomía tanto por parte de las entidades rescatadas como por parte de España en general.
"Si se produce este rescate o ayuda a la banca, una de las cosas que se va a pedir a cambio va a ser la intervención, la regulación de ese sistema rescatado o de esas entidades rescatadas o ayudadas. ¿Qué quiere decir esto? Quiere decir que, por ejemplo, la autoridad del Banco de España va a verse disminuida. La entidad bancaria ayudada o rescatada va a perder soberanía y el país también perdería soberanía evidentemente”, advierte Santiago Niño Becerra.