El fabricante nipón Panasonic anunció que Sanyo Electric se convirtió oficialmente en su filial después de adquirir el 50,27% de las acciones de la compañía. Esta adquisición dará lugar al nacimiento del segundo conglomerado electrónico de Japón y presupone la consolidación ulterior de la industria, que sufre de una reducción de la demanda de los consumidores.
Panasonic ya confirmó a principios de este mes que había completado la adquisición de cerca del 50 por ciento de Sanyo por 403.780 millones de yenes (3.110 millones de euros) con vistas a la fusión cuyos detalles, como está previsto, se darán a conocer a principios de enero de 2010.
Se prevé que las ventas conjuntas de la nueva compañía alcancen los 8,66 billones de yenes (66.845 millones de euros), lo que la situaría ligeramente por detrás del primer fabricante de electrónica de Japón, Hitachi, que en el actual año fiscal espera vender 8,7 billones de yenes (67.194 millones de euros).
Panasonic, el mayor fabricante de televisores de plasma del mundo, espera aumentar su competitividad en el desarrollo de las “tecnologías verdes” al aprovechar la experiencia de Sanyo en la fabricación de baterías recargables y pantallas solares. La fusión de “las tecnologías verdes” de Panasonic y Sanyo creará un monopolio en el mercado de las baterías para automóviles con motor eléctrico. Juntos, estas compañías suministrarán con sus productos a Toyota Motor, Ford Motor, PSA Peugeot Citroën y Honda Motos.
Panasonic prevé destinar a esa división una inversión de 100.000 millones de yenes (770 millones de euros) para pagar sus deudas. Los analistas estiman que en el primer trimestre de 2009 Sanyo perdió unos 350 millones de dólares. Panasonic adquirió las acciones de Sanyo, el principal proveedor mundial de baterías de litio, en una oferta pública que comenzó el 5 de noviembre. En el marco de esta oferta pública Panasonic ofreció unos 131 yenes (aproximadamente un euro) por título, muy por debajo de los 216 yenes (1,66 euros) del precio de mercado, informó EFE.