"Esta semana hemos completado la instalación de más de cuatro mil paneles solares que proveerán electricidad a la población del atolón, que asciende a 1.400 personas", dijo en un comunicado uno de los ingenieros del proyecto, Dean Parchomchuk.
Se informa de que el proyecto, que cuesta 7.500 millones de dólares, está financiado por el Ministerio de Asuntos Exteriores y Comercio de Nueva Zelanda.
"Es bueno que por fin podamos dejar de utilizar las centrales eléctricas que funcionan a partir de diésel. Las fugas de combustible crean enormes problemas para el medio ambiente en el atolón. Además, usando paneles solares ya no dependeremos de los suministros desde el exterior", afirmó el ministro de Energía de Tokelau.
Para generar electricidad cada año en las islas del atolón se utilizan más de 2.000 barriles de petróleo con un valor de alrededor de un millón de dólares. La aplicación de las nuevas tecnologías también ayudará a ahorrar en combustible.
“De acuerdo con nuestros cálculos, esta innovación se verá recompensada en los próximos cinco años. La instalación de las baterías se convertirá en un ahorro significativo, especialmente antes de la primera reparación deben funcionar sin problemas durante al menos 20 años", subrayó Mike Bassett, jefe de la compañía neozelandesa Powersmart Solar.
Tokelau se compone de tres atolones llamados Nukunonu, Fakaofo y Atafu. Las islas se elevan sobre el nivel del mar en unos tres, cuatro metros. Los isleños viven principalmente de la pesca y los subsidios del Gobierno de Nueva Zelanda.