Compañías como Apple, HP, Samsung, Nokia y muchas otras empresas de tecnología líderes a nivel mundial compran ahí muchos de los dispositivos que usan para sus productos, como módulos de memoria, microprocesadores y discos duros.
Los expertos señalan que gran parte de los gastos de las marcas punteras se deriva precisamente del coste de las materias primas y componentes electrónicos, motivo por el cual -aseguran- el aumento de la producción se traduciría en precios más altos para los productos finales. De este modo, la medida repercutiría modificando al alza el precio de los ordenadores, teléfonos móviles, consolas de videojuegos y muchos otros aparatos electrónicos.
Suicidios y huelgas
Shenzhen, situada cerca de la próspera Hong Kong, se hizo tristemente famosa después de que se registrara en ella una serie de suicidios ocurridos en 2010 en la fábrica de Foxconn (multinacional taiwanesa que tiene la mayor parte de sus fábricas distribuidas en territorio de la República Popular China). Es probable que los fabricantes de productos electrónicos como Foxconn trasladen su producción a ciudades más baratas del país. Sin embargo, esto no puede salir tan rentable, porque los salarios están aumentando en muchas regiones.La inflación en China en los últimos años ha provocado las protestas de los trabajadores. De mayo a junio de 2012 se organizaron gran cantidad de huelgas.
Esto llevó a las autoridades locales de Shenzhen a anunciar un aumento del salario mínimo mensual, de tal forma que Shenzhen se convertirá en la segunda ciudad china con mayores salarios mínimos tan solo por detrás de Pekín. Por su parte, Foxconn, ha anunciado un incremento en los salarios de entre el 16 y el 25%.
Recientemente, el ex jefe de la Cámara de Comercio China-UE, Joerg Wuttke, asegura que el costo de la producción de la mercadería china podría aumentar hasta en tres veces para 2020.