Según el comunicado de prensa del Ministerio de Trabajo estadounidense, la tasa de desempleo en EE.UU. en septiembre cayó a 7,8%, el índice más bajo desde enero de 2009.
No obstante, esa estadística solo tiene en cuenta a los ciudadanos que están buscando empleo activamente.
El economista jefe en Estados Unidos de Capital Economics, una empresa internacional independiente especializada en estudios económicos Paul Ashworth, afirma que la mejor manera de saber con exactitud cuál es el nivel de desempleo es calcular la proporción 'empleo-población', que compara el número de estadounidenses empleados con el número total de adultos del país. Según Paul Ashworth, dicha proporción revelaría una tasa de desempleo mucho más alta de la oficial.
En realidad, solo el 58,7% de la población de EE.UU. está empleada, lo que significa que aproximadamente 82 millones de estadounidenses (el 41% de los adultos) se encuentran sin trabajo. Es más, el 33% de ellos ni siquiera lo busca.
Las sumas de seguros de desempleo pagados por el Gobierno estadounidense el año pasado son impresionantes. Según afirman los republicanos del Comité de Presupuestos del Senado, en 2011 el Gobierno gastó 1,03 billones de dólares en programas de subsidios por desempleo.