Volkswagen elabora un proyecto para destronar a Toyota como la mayor compañía automotriz del mundo, al presentar un gran plan de expansión con el que pretende aumentar sus ventas anuales de vehículos a ocho millones para mediados de la década y 10 millones para 2018.
Según The Wall Street Journal, periódico financiero de EE. UU., el mayor fabricante de automóviles de Europa, que produce los autos VW y Audi y tiene entre sus nueve marcas la de autos deportivos de lujo Bugatti y los camiones pesados Scania, vendió 6,3 millones de vehículos en 2009, un 19% menos que los 7,8 millones de vehículos vendidos por Toyota.
Volkswagen declaró que espera alcanzar un margen de ganancias antes de intereses e impuestos (EBIT) para su negocio automovilístico "de al menos un 5% en el marco del nuevo proyecto, sin contar la integración planeada de Porsche Automobil Holding SE en 2011". Su EBIT en los primeros nueve meses de 2009 fue del 2%.
El anuncio de alcanzar estos ambiciosos planes de rentabilidad junto con un vigoroso plan de expansión llega en un momento en el que Toyota sufre las secuelas de una enorme convocatoria para la revisión por defectos de fábrica de algunos de sus modelos y una congelación en las ventas y la producción en varias de sus factorías. Algunos observadores de la industria creen que esos problemas de calidad podrían estar vinculados al rápido crecimiento de Toyota en los últimos años.
La compañía japonesa, que continúa como líder en el mercado de EE. UU., tiene desde hace tiempo una reputación inmaculada de producir vehículos seguros y de alta calidad. Pero este llamamiento para la revisión de coches ya comercializados, relacionado con un defecto en un pedal de aceleración, le obligó a llamar a revisión a 8,1 millones de vehículos.
Volkswagen apunta a un margen de ganancias antes de impuestos de más del 8% para 2018. Se planea que el gasto de capital de la empresa en sus operaciones automovilísticas sea de alrededor del 6% a largo plazo. La compañía busca un rendimiento sobre la inversión en sus operaciones de más del 16% para 2018.
El productor del ‘automóvil del pueblo’ afirmó que planea alcanzar "más recortes significativos de gastos" en los próximos años, en parte a través de la creación de más sinergias entre sus diferentes líneas de modelos y de conseguir mayor flexibilidad.
En 2009 el fabricante de autos alemán logró mejores resultados que sus rivales que sufrieron más el lúgubre panorama que asoló a la industria. Estos resultados se debieron principalmente a su amplia presencia en China y una sólida posición en Brasil, mientras que los incentivos estatales para canjear autos viejos que consumían mucho combustible estimularon las ventas en Alemania.
Pero los esfuerzos de reconquistar terreno en EE. UU. resultaron ser una lucha costosa, lo que forzó a la empresa a aumentar la inversión. Volkswagen gastará un total de125 millones de dólares sólo en dos concesionarios nuevos en la ciudad de Nueva York como parte de un plan más extenso para incrementar la presencia en EE. UU. de sus marcas básicas (VW y Audi), entre otras medidas.