La decisión de la CE significa "un paso clave" hacia el lanzamiento de las negociaciones con Washington y se ha tomado solo un mes después de que ambas partes declararan su intención de llegar a un acuerdo comercial, según ha afirmado durante una rueda de prensa el comisario europeo de Comercio, Karel De Gucht.
El comisario ha expresado su esperanza de que los países comunitarios inmediatamente empiecen negociaciones con EE.UU. antes de la pausa veraniega y las concluyan en unos dos años, coincidiendo con el fin del mandato de la CE y las elecciones legislativas en EE.UU.
Se espera que las conversaciones no se limiten exclusivamente a la eliminación de los aranceles aduaneros, que son bajos (4% de media), sino que tratarán de disminuir las barreras no arancelarias impuestas por las diferencias en la regulación y por las cargas burocráticas. Además, se dirigirán a liberalizar el comercio de servicios y contratos públicos.
El acuerdo de libre comercio proporcionará a la UE beneficios económicos de unos 155.000 millones de dólares al año y a EE.UU. unos 124.000 millones, según muestra el estudio independiente encargado por la Comisión.