Los depositantes en Chipre, chivos expiatorios de la crisis

Mientras el Banco Central de Chipre prohíbe a los bancos realizar pagos y transferencias en el país y en el extranjero, los depositantes pueden perder hasta 6.000 millones de euros como resultado de la congelación parcial de sus cuentas.
La medida, una condición para que Chipre pueda recibir el rescate de la UE y por el FMI, concierne tanto a losresidentes como a los no residentes de Chipre. A los depósitos menores de 100.000 euros se les quitará un 6,75% y un 9,99% a los que excedan esa cantidad. 

Sin el rescate de 10.000 millones de euros de los acreedores internacionales Chipre podría enfrentarse a un impago. Una amortización de esta índole convertirá los depósitos en no rentables. En teoría, la decisión de las autoridades chipriotas puede ser impugnada en los tribunales, pero los abogados creen que la posibilidad de abolir el impuesto es muy pequeña.  

La decisión tomada por Chipre bajo la presión de la UE y el FMI no tiene precedentes. Por primera vez en la historia de la zona euro los depositantes están obligados a participar en la estabilización del mercado financiero del país.  

Según los expertos, esto sienta un precedente muy peligroso. "Después de todo, Chipre es un país bastante pequeño en términos económicos. Si algo de esta índole  sucede o incluso surgen rumores de que pueda suceder en otro país, me temo que la magnitud del problema será mucho mayor. Por otra parte, todo va a depender de cómo pase la operación, aunque no descarto que el pánico pueda propagarse a otros países”, destacó el director ejecutivo de la empresa de inversión Troika Dialog Evgeny Gavrilénkov citado por 'Business FM'.     

Los chipriotas están sorprendidos por la decisión de imponer un impuesto único a depósitos bancarios y ya se apresuran a retirar su dinero de las cuentas, formándose largas colas de clientes. Algunos de los bancos no operan, mientras que otros establecen un límite de retirada de fondos de 600 euros. 


La isla de la mala suerte bancaria 


Pero no solo los chipriotas sentirán los efectos de la medida. Según algunas estimaciones, el volumen de recursos rusos en las entidades de la isla se cifra en unos 25.000 millones de euros. Las pérdidas de los titulares rusos de cuentas bancarias en Chipre podrían ascender a 1.500 millones de euros.  

Además, en Chipre viven unos 60.000 ciudadanos de Reino Unido, la mayoría de ellos jubilados, y sus pérdidas por el impuesto rondarían los 200 millones de euros. El gobierno del Reino Unido planea compensar las pérdidas para los soldados del ejército británico destinados en Chipre.  

La medida todavía tiene que ser aprobada por el parlamento de Chipre. El premio Nobel de Economía y el jefe del Consejo Nacional de Política Económica de Chipre Christopher A. Pissarides, considera que la economía de la república se colapsará si el gobierno chipriota no introduce este 'corralito' parcial, que tanto decepciona a los ahorradores, que se sienten engañados por sus bancos.

La huida de capitales del país y el aumento de los precios de los bienes raíces en Chipre y de los metales preciosos y el oro son algunas consecuencias que prevén los expertos.