El portavoz del Ministerio chino de Relaciones Exteriores, Hong Lei, respondió acusando a EE.UU. de adoptar "una actitud sesgada hacia las empresas chinas bajo el pretexto de la seguridad de la información".
El Profesor de Economía Política, Julio César Gambina, considera que con tales medidas EE.UU. “responde como una potencia dominante imperialista” y pone a China "en lugar de subordinación", declaró en una entrevista con RT.
Con tales medidas EE.UU. responde como una potencia dominante imperialista y pone a China en lugar de subordinación
Gambina recuerda que conservar las buenas relaciones "es de mutuo beneficio" porque China "no puede avanzar sin las inversiones estadounidenses" y, al mismo tiempo, "EE.UU. se beneficia de una producción barata" en el país asiático.
"China no tendría la expansión de su economía sin las inversiones de origen estadounidense”, dice el analista, que considera que las restricciones "complican al mismo EE.UU.".
La disposición obliga a las agencias a que evalúen el riesgo de ciberespionaje o de sabotaje tras la adquisición de productos tecnológicos chinos. No en vano, las dos potencias se vienen acusando de ‘hackeo’ desde hace algunos meses. El mes pasado, una compañía de investigación estadounidense reportó que una unidad del ejército chino había robado "cientos de terabytes" de información de empresas estadounidenses.
Por su parte, Pekín calificó el informe de "infundado" y aseguró que sus sitios web del Ministerio de Defensa fueron a menudo objeto de ataques de hackers procedentes de los EE.UU.