La Oficina de Análisis Económico revisará los datos actuales e históricos y añadirá 468.000 millones de dólares al PIB nacional, con respecto al año anterior.
Entre los productos no manufacturados que serán considerados ahora, se encuentran los derechos de películas, televisión, libros y música, así como el dinero de las investigaciones. EE.UU. se convertirá de esta forma en el primer país que contabiliza estos denominados “activos intangibles”.
El economista Santiago Niño Becerra cree que se trata de una maniobra de distracción para ocultar los problemas financieros.
"Este tipo de historias normalmente aparecen cuando hay problemas", opina el economista, subrayando que el "PIB, tal como lo hemos calculado siempre [...] es un instrumento muy bueno y recoge la evolución de una economía".
"Es muy curioso que cuando empieza a haber problemas, se salga con que va a cambiar la definición del PIB o va a cambiar la estructuración", dice Becerra, que tacha la medida de "maniobra de distracción".