Fundado en 2007, el Banco espera completar un fondo de 20.000 millones de dólares, y "en el primer semestre del año que viene estará ya en funcionamiento con los primeros países miembros asociados que son: Argentina, Uruguay, Venezuela, Bolivia, Ecuador y Brasil", anunció recientemente el canciller venezolano Elías Jaua.
El Banco del Sur es un paso más a la vinculación soberana de la región frente a Europa, donde el BCE se ha convertido en un espacio de los lobbies alemanes
Este nuevo organismo sudamericano, que celebró su primer Consejo de Ministros el pasado 12 de junio en Caracas, presenta una propuesta diferente al sistema vigente a nivel mundial, con entidades rectoras como el FMI, el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo.
El Banco del Sur tiene como elemento característico el derecho a un voto para cada país miembro, independientemente del monto de los recursos aportados al capital inicial.
De esta forma establece diferencias con el FMI, donde los votos están asociados con el volumen de recursos de sus integrantes, situación que facilita a EE.UU. y las potencias europeas la definición de los lineamientos del ente multilateral.
Además, los créditos están exentos de los condicionamientos característicos establecidos por el FMI para la aprobación de financiamientos.
Ellos [Latinoamérica] crecen y la UE se hunde. No estaría nada mal que España perteneciera al Banco del SurLa creación del "Banco del Sur es un paso más a la vinculación soberana de la región frente a Europa, donde el Banco Central Europeo (BCE) se ha convertido en un espacio de los lobbies alemanes, que ha impedido a los países tener autonomía en su política económica, carecer de política monetaria", asegura por su parte el profesor de Ciencia Política, Pablo Iglesias, citado por el portal español.
Mientras, el profesor de Economía Política de la Universidad de Málaga, Alberto Montero, destaca que "superar los ajustes neoliberales del FMI y del Banco Mundial era una exigencia para reinventar el continente" americano. "Por eso ellos crecen y la Unión Europea se hunde. No estaría nada mal que España perteneciera al Banco del Sur, junto con Grecia y Portugal", agregó.
Aunque "el Banco del Sur nunca va a poder llegar a los recursos monetarios del FMI (…), se trata de empezar a articular instituciones financieras que, desde la humildad y la modestia, sean una alternativa a las instituciones convencionales", finalizó Montero.