Según Ramírez, tal producción "tiene un altísimo costo ambiental". "Es un desastre lo que está pasando en Dakota del Norte", donde se hallan los yacimientos de rocas esquistosas, dijo el ministro en una entrevista en el canal Televen de la red nacional de la televisión privada.
Es más, el aumento de la explotación de petróleo de esquisto en EE.UU. "está desplazando alguna producción de países de África", como Nigeria y Angola, cuenta Ramírez.
Para comparar la industria petrolera estadounidense con la venezolana, el ministro acentuó que la explotación del petróleo de la Faja del Orinoco "no solo es mucho más económica, sino que no tiene el impacto ambiental que tiene este petróleo de esquistos". Por ahora Venezuela es el cuarto país petrolero mundial, con una posición "muy estable y confortable", destacó Ramírez.
El año pasado el petróleo de esquisto proporcionó el 29% de la producción total de crudo en EE.UU., mientras que el gas de esquisto fue el 40%. EE.UU. es la segunda potencia mundial con las mayores reservas de gas y petróleo de esquisto, después de Rusia. Según la Administración de Información de Energía de EE.UU., Rusia tiene reservas por 75.000 millones de barriles de crudo. EE.UU. tiene 58.000 millones de barriles. China, Argentina y Libia completan los cinco primeros lugares.