'Secretos' que los dueños de los hoteles no quieren que sepamos

Pensar en un hotel equivale a imaginar el placer de dormir en una cama gigante con sábanas blancas y de secarse con toallas frescas por la mañana. Sin embargo, esas toallas y sábanas podrían no estar tan limpias como pareciran a simple vista. Estos son algunos de los secretos que el recepcionista nunca le contará durante su registro, según Quora.
Quite mantas o edredones de la cama, ya que no todos los hoteles los limpian después de que se vaya cada huésped, aunque deben hacerlo. / pixabay.com
Compruebe la mirilla de su puerta. Si está dañada o ha sido modificada (para incorporar una videocámara espía, por ejemplo), pida otra habitación o cubra la mirilla con un papel. / pixabay.com
Los chinches acuden a la madera, razón por la que los estantes para las maletas son un foco de estos insectos. Ponga mejor su equipaje en otras piezas de mobiliario y dejé las maletas en el suelo. / pixabay.com
El precio de una habitación de hotel depende de la suma gastada para construirla. Por cada 1.000 dólares que el hotel invierte en una habitación, debería cobrar un dólar por noche. Si un hotel invirtió 300.000 de dólares, debería cobrar 300 por noche. / pixabay.com
Cuidado con el secador de pelo colgado en la pared, así como con los mandos a distancia de TV y los interruptores de luz, pues son de los objetos más antihigiénicos. / pixabay.com
Aunque los mini bares de las habitaciones son muy caros, no son rentables. / pixabay.com