"Lo perdí todo": 19 imágenes de víctimas del terremoto en México ante sus hogares destruidos
Publicado: 17 Oct 2017 14:54 GMT
El devastador terremoto de 7,1 que sacudió México el pasado mes de septiembre dejó unos 400 muertos y causó enormes daños en viviendas. Cientos de personas se han visto obligadas a hospedarse con sus familiares y amigos, mientras sus casas son reparadas o encuentren nuevos hogares. El fotógrafo Edgard Garrido retrató a las víctimas del terremoto, que le contaron sus historias cerca de sus viviendas derruidas.
Ana María Hernandez, dependienta de una tienda de ropa de 37 años, frente a su casa destruida en Jojutla, Juarez. "Lo perdí todo. Mi tía murió aquí".
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Edgard Garrido
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Tomasa Mozo, de 69 años, ama de casa, en su casa destruida en San José Platanar. Ahora vive en otra habitación de la casa y espera a reparar los daños lo más pronto posible. "Tengo miedo de salir, no puedo dormir".
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Edgard Garrido
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Elena Zapata, de 69 años, con su nieta Mariana de 3 años en las ruinas de su casa en Tepalcingo. "Lo más precioso que tengo es la vida de mi nieta. Siento angustia, oigo ruidos, solo quiero llorar".
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Edgard Garrido
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Cenobia Riquelme, de 76 años, ama de casa que padece de alzhéimer, fue rescatada por un soldado, pero su marido no sobrevivió. "Mi madre busca a mi padre para prepararle el almuerzo. Me preocupo mucho", dice su hijo.
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Edgard Garrido
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Hector Guzman, campesino de 48 años y representante del presidente municipal en San José Platanar, con una maqueta de la casa temporal de bambú que está construyendo para reemplazar a la casa de su padre, destruida por el terremoto.
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Edgard Garrido
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Teresa Luna, costurera, de 49 años, con su perro Dokie. "La cosa más valiosa que he recuperado es mi perro". Vive en el patio de su casa derruida y espera volver cuando los daños sean reparados.
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Edgard Garrido
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Tomasa Mozo, de 69 años, ama de casa, en su casa destruida en San José Platanar. Ahora vive en otra habitación de la casa y espera a reparar los daños lo más pronto posible. "Tengo miedo de salir, no puedo dormir".
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Edgard Garrido
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Juan Sánchez, de 53 años, parroquiano y guarda de la iglesia San Juan Bautista. Ofreció a algunas familias refugio en su casa, que no resultó dañada. "Celebramos misas bajo una carpa. Es grande tristeza".
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Edgard Garrido
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María Guzmán, de 70 años, ama de casa, entre los escombros de su casa en San José Platanar. Vive en un refugio y espera que su casa sea reconstruida. "Lo más valioso que he recuperado fue la foto del día de mi boda".
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Edgard Garrido
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René Contreras, de 20 años, estudiante, entre los restos de su casa en Jojutla de Juárez. "Ahora vivo con mi hermano. Mañana un hombre de buen corazón me construirá una casa de emergencia. Lucharé para salir adelante".
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Edgard Garrido
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María Isabel Alvarado, de 75 años, ama de casa, en la calle fuera de su casa, que sufrió daños menores. "Querría que nada le sucediera a mi familia y a mi comedor colonial".
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Catalina Martínez, de 78 años, ama de casa, en la entrada de su casa destruida en San José Platanar. Vive en el patio de su casa. "Espero que las autoridades no nos engañen con sus promesas. No sé qué va a suceder con nosotros".
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Edgard Garrido
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Luis Medina, de 36 años, agricultor, María Teresa Espinoza, de 35 años, ama de casa, y su hija María, de 9 años. Viven en su patio y esperan la demolición de su casa. "Lo más valioso que he recuperado ha sido la imagen de la Virgen", cuenta María Teresa.
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Edgard Garrido
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Jaime Delgado, de 21 años, trabajador agrícola, en una zona afectada por el terremoto donde ayudó en las labores de rescate. "Una señora murió aquí, aplastada por los escombros. Todo se acabó, ahora busco pedazos de metal para venderlos. Mi situación económica es mala".
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Edgard Garrido
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Prudencio Gutiérrez, de 66 años, trabajador agrícola. Su casa en San Francisco Xochiteopan fue gravemente dañada, pero logró salvar su cama y algunas prendas de ropa." "Lo más valioso que he recuperado ha sido mi sombrero".
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Edgard Garrido
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Ventura Sánchez, de 63 años, ama de casa, entre los escombros de su casa en La Nopalera. Vive en su patio. "Espero que las autoridades no nos engañen con promesas. Estoy muy triste".
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Edgard Garrido
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María Trinidad González, ama de casa, de 41 años. Con la ayuda de familiares y soldados, sacó algunos muebles de su casa gravemente dañada. "Lo más valioso que he recuperado es mi vajilla".
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Luís García, de 79 años, albañil, frente a una casa que construyó en Jojutla de Juárez. "Ninguna de las casas que construí ha resultado dañada por el terremoto".
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Miguel Nájera, de 50 años, agricultor. Vive en la habitación de su casa en San José Platanar que quedó gravemente dañada en el terremoto. "Tengo hermanos en EE.UU. y espero que puedan ayudarme".
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