Domínguez, el mejor.

Noche de entrega de premios en Moscú: la Unión Rusa de Fútbol cerraba la temporada 2009 homenajeando a los mejores. La velada transcurrió en un elegante hotel céntrico, en uno de esos hoteles que si no queda más que pasar por la vereda bajamos, la mirada o tratamos de caminar lo más rápido posible, por miedo a que nos quieran cobrar algo...

Decía, entonces, que lo mejor del fútbol ruso, cosecha 2009, estaba allí: Igor Akinfeev, Yuri Semin, Alejandro Domínguez, Valeri Karpin, entre otros. La fiesta estaba dedicada a la Liga Premier Rusa y se evitó tratar el escabroso tema del (no) Mundial Sudáfrica 2010. Al final de cada temporada, tenemos equipos desafortunados: el descenso no perdona y puntualmente, cada año, se carga a dos equipos.

Todo lo opuesto esta noche lo representaba el Rubín Kazán, bicampeón ruso. Los de Kazán fueron los grandes ganadores del año, no por nada viajaron hasta Moscú el entrenador Kurban Berdyev y Alejandro Domínguez, uno de los máximos goleadores del torneo y de su equipo con 16 tantos. Rubín fue elegido como el mejor equipo de la temporada, Berdyev como el mejor entrenador y Domínguez como el mejor jugador.

¿Merecido? Sí. Porque no sólo terminó en lo mas alto del equipo con 20 puntos (según el sistema de gol+asistencia), sino que fue el máximo director y creador del campeón. El "Chori", al recibir el premio, se bajó del pedestal al decir que "el mejor jugador que tenemos es el equipo" y también que "me siento halagado y a la vez sorprendido, en la liga Rusa hay muchos futbolistas que merecen este premio tanto como yo".

Además de los 3 premios mencionados que viajarón a Kazán; fueron entregados muchos otros entre los que destacamos: Goleador de 2009, Welliton (Spartak); Mejor arquero de 2009, Akinfeev (CSKA); Revelación de 2009, Shennikov (CSKA); Mejor árbitro de 2009, Stanislav Sukhina. Ah, claro, no podía irme sin anotar éste: Mejor equipo de hinchas, la selección integrada por hinchas de Rusia. ¿Fina ironía?

 

 

Alejandro Domínguez

Foto: RIA Novosti por Maxim Bogdovid