Por qué Rusia prepara tanto su defensa militar y en Occidente la acusan de "agresiva"

Roque Caravedo

Hace poco más de un año un periodista de la BBC le preguntaba a Vladímir Putin si no veía necesario cambiar su política exterior tan "agresiva", a lo que el presidente ruso contestó contundente con tres puntos bastante claros.

En concreto Putin señaló que Rusia tiene solo dos bases militares en el extranjero, en comparación con las decenas de bases estadounidenses por todo el mundo, que el presupuesto armamentístico de EE.UU. es 10 veces superior al de Rusia, y que Rusia no tiene desplegado armamento nuclear estratégico cerca de las fronteras de EE.UU. como lo hace EE.UU. cerca de las fronteras rusas. "Pese a ello ustedes siguen pensando que nosotros llevamos una política agresiva. ¿A ustedes todavía les queda un poco de cordura?", remató, no sin antes subrayar que Rusia está preparada no para atacar a nadie sino más bien para "defender sus intereses nacionales".

Y es que en Occidente han hecho creer a la gente que Rusia es un país agresivo. Los expertos aseguran que las falsas acusaciones occidentales son parte de una estrategia propagandística para 'demonizar' a Rusia y con ese pretexto llenar Europa de armamento estratégico.

Pero, ¿en qué más se basan para acusar a Rusia de agresiva? Si le preguntas a un ruso por qué su país desarrolla y produce tantas armas te responden sin dudarlo: "para venderlas, puesto que son parte de los ingresos del país", y tras pensarlo varios segundos algunos completan su respuesta: "y para defendernos, ya que debemos estar preparados". La frase "estar preparados" se me queda dando vueltas en la cabeza y he intentado encontrar una explicación en su pasado. 

La seguridad de los rusos ante todo

A lo largo de la historia el pueblo ruso ha tenido que enfrentarse a locos líderes que intentaron conquistar su vasto territorio, entre los que destacan Napoleón Bonaparte y Hitler. Debido a que este 9 de mayo en Rusia se celebró el Día de la Victoria sobre la Alemania nazi, intentaré explicar ese "estar preparados" poniendo como ejemplo datos y experiencias de la Segunda Guerra Mundial

Cabe recordar que antes de que empezase este conflicto bélico, considerado el más sangriento de la historia, la Alemania de Hitler y la URSS de Stalin firmaron un tratado de no agresión (el Pacto Ribbentrop-Mólotov). Este documento se firmó en Moscú el 23 de agosto de 1939, nueve días antes de que empezara la Segunda Guerra Mundial. El punto clave de este pacto es que antes de que se firmara el documento, Hitler ya tenía en mente que la invasión de la URSS sería inminente, mientras que Stalin no se esperaba un repentino ataque alemán.

El líder nazi empezó a fraguar la Operación Barbarroja a finales de 1940. El objetivo de esta operación era invadir la URSS en mayo del siguiente año, cuando ya hacía calor, no obstante, el plan tuvo que esperar hasta junio (los meses son claves, motivo por el cual los enuncio).

Los alemanes sintieron el verdadero valor soviético

Es necesario subrayar que las fuerzas soviéticas se encontraban desprevenidas, lo que explica la gran cantidad de bajas que dejó la Operación Barbarroja (más de dos millones y medio de muertos, una cifra considerablemente alta en comparación con las 200.000 bajas nazis). Los alemanes avanzaron rápidamente, matando a diestra y siniestra, ocupando territorios soviéticos y sintiéndose casi vencedores. Pero la resistencia soviética alargó tanto la operación que llegó el invierno, y los alemanes empezaron a sentir su inferioridad. Ese año (1941) para suerte de los soviéticos, se registraron temperaturas récord que llegaron a rondar los 50 grados bajo cero. Gracias a eso, sumado al hecho de que al campo de batalla llegaron fuerzas siberianas bien preparadas para estas condiciones climáticas, el Ejército Rojo encontró un suspiro para planear su táctica bélica. Los alemanes, de estar a unos 20 kilómetros de la conquista de Moscú, tuvieron que retroceder varias decenas de kilómetros. Los planes de Hitler hicieron aguas y la Operación Barbarroja fracasó

El gran error de Stalin, quizás, fue creer que el Tercer Reich no violaría el Pacto Ribbentrop-Mólotov tan repentinamente. Cuando recibió la 'cuchillada por la espalda', tardó todavía en darse cuenta de la gravedad de la situación. El factor sorpresa puso en jaque al líder soviético. No obstante, la maquinaria bélica del Ejército Rojo empezó a rodar tras el fracaso de la mencionada operación. 

Luego de la Operación Barbarroja se desató una serie de batallas entre las que destacan las de Stalingrado y la de Kursk, donde se produjo la mayor concentración de carros de combate de la historia. Finalmente, el 3 de mayo de 1945 los soviéticos tomaron Berlín y cinco días más tarde se firmó la capitulación. La Alemania nazi por fin había sido derrotada. Es necesario destacar que la URSS no ganó la guerra gracias al frío, como muchos suelen creer, sino al valor y a la resistencia del pueblo soviético durante los 4 años de guerra.

Conclusión 

La historia de Rusia está escrita con sangre y guerras, con millones de pérdidas humanas que nadie quiere que se vuelvan a repetir. Para ello, es necesario "estar preparados", como lo comprende cualquier ciudadano ruso. La esfera militar rusa siempre ha estado bien desarrollada, y mucho más tras la Segunda Guerra Mundial, cuando empezó una carrera armamentística durante la Guerra Fría. Cuando se desmembró la URSS, Rusia estuvo más de una década con un Ejército bastante pobre, pero cuando Putin llegó al poder, sintió la necesidad de hacer una reestructuración y una modernización de las Fuerzas Armadas. ¿Pero, para qué? "Porque hay que estar preparados".