Los problemas en el control de la inmigración que están afectando a Panamá son complejos y de causas múltiples. Por ello hemos recurrido a varios puntos de vista para obtener un enfoque rico y matizado de la cuestión.
- El periodista y profesor universitario Mauro Zúñiga Saavedra, en una de sus primeras intervenciones en el debate, afirma que "realmente hay un gobierno totalitario", y explica que si al inmigrante se le impone una política migratoria "el no se va a ir, se va a sumergir: va a seguir ofreciendo su servicio o su producto, pero en un mercado sumergido". Para Zúñiga "el problema está en la política, y todo el mundo lo sabe".
- Rafael Rodríguez, presidente de la Asociación de Ciudadanos Naturalizados de Panamá (ARENA), destaca por su parte que "la República de Panamá, desde su inicio, ha sido un crisol de razas; este país nació en manos de extranjeros, de jamaicanos, africanos, españoles, chinos…" y que ahora "lo que se tiene que organizar aquí realmente es una verdadera política migratoria como existe en otros países". En su opinión, "los extranjeros cuando llegan a este país, piensan que llegaron al paraíso".
- Ulises Barría es coordinador del movimiento nacional Despierta Panamá, y recuerda que Panamá es "un país pequeño, con una infraestructura limitada y unos recursos limitados" que quiere "ayudar con el tema migratorio", pero teniendo en cuenta que "todo tiene su límite y todo debe tener su control". También denuncia que "el gobierno no quiere hacer valer las leyes migratorias ya existentes para evitar (...) el flujo masivo de inmigración sin ningún tipo de control".
Recomendamos el visionado completo del debate, en el que se profundiza sobre los distintos tipos de inmigración que acuden a panamá, con sus correspondientes motivaciones y particularidades, y se analiza el problema en clave de máxima actualidad.