La caída de las exportaciones de grano y fertilizantes procedentes de Rusia y Ucrania auguran escasez y subidas de precios de los alimentos básicos e incluso posibles hambrunas. Occidente acusa a Rusia de utilizar el comercio de cereales como arma en el frente económico. El mismo Occidente que impuso sanciones sobre los puertos del mar Negro y cerró la entrada a la UE de barcos, aviones y camiones de transporte de mercancías rusos. ¿Quién pone en riesgo la seguridad alimentaria mundial?