La actual crisis catalana se debe al "inmovilismo del Partido Popular, la dejación de las tareas políticas", cree el diputado socialista Marc Lamuà. Con todo, el parlamentario asegura que "la desatención del Gobierno no justifica la vía unilateral" por la que han optado las autoridades catalanas.
"Cuando la política no hace lo que tiene que hacer, cuando el entorno político no encuentra los espacios (...) necesarios para resolver y encauzar los problemas que son políticos, el Estado actúa por los cauces jurídicos", destaca el diputado.
La sociedad se está tensionando hasta límites que nunca habíamos tenido
"En democracia todo es posible por los cauces adecuados, lo que no es posible es saltarse las leyes", enfatiza.
Según Lamuà, "la empatía" para entender posiciones diferentes convierte al grupo socialista en el único puente entre dos puntos de vista sobre el futuro de Cataluña. "Es el único puente tendido entre los dos frentes que no se tocan", afirma el político.
"Hay solo una solución, que es el diálogo", cree Lamuà. El diputado en el Congreso llama a encontrar "cauces sosegados" para resolver la situación, ya que la "sociedad se está tensionando hasta límites que nunca habíamos tenido".
El diputado del Grupo Socialista en el Parlamento lamenta que "hay una parte en la sociedad catalana (...) que se siente muy desapegada del proyecto del Estado" a causa de "la inacción (...) de un Gobierno español totalmente incapaz". El político explica que las ideas independentistas "nacen de la protesta en contra de las políticas" del Gobierno.
Escenario impredecible
Lamuà estima que la incertidumbre con la cual el país se enfrenta en este momento es "la demostración del fallo político catalán y español para gestionar toda esta situación". Según sus palabras, nadie puede predecir qué puede ocurrir este 1 de octubre, día del referéndum catalán.
Las fuerzas de orden de Cataluña, los Mossos d'Esquadra, se encuentran en una situación complicada, porque les han puesto "en la tesitura de no saber a quién tienen que obedecer", explica Lamuà. "Es la irresponsabilidad máxima de un político poner las fuerzas de seguridad entre espada y la pared", señala el diputado.