A falta de pocos días para que el presidente de Rusia, Vladímir Putin, realice una visita oficial a Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos (EAU), el mandatario ha concedido en Sochi una entrevista a varios medios en la que discute los objetivos de la gira y varios temas de importancia global.
El corresponsal de Al Arabiya, Mohammed Tomaihi, el de Sky News Arabia, Mohammad Khatib, y el jefe del departamento de programas políticos de RT en árabe, Salam Musafir, han preguntado al inquilino del Kremlin sobre problemáticas actuales relacionadas con Siria, Irán, EE.UU. y la OTAN, entre otras cuestiones.
Situación en Siria
De acuerdo con el presidente ruso, el panorama en el país árabe ha mostrado una visible mejoría que se refleja en la percepción que el pueblo sirio tiene del Gobierno de Bashar al Assad.
"Hoy en día miles de personas están regresando a sus hogares. Regresan desde el extranjero y desde otras provincias de Siria. Eso es una clara señal de que la gente confía en la situación actual, confía en las garantías del Estado", señala el mandatario ruso.
Putin celebra que "los sirios tratan a los militares rusos y a la policía militar rusa de manera positiva y con mucha confianza" mientras se mantienen en el país árabe, una presencia que tiene como fin respaldar a Damasco para evitar la expansión del terrorismo.
"En cuanto a Siria, nosotros fuimos allí para apoyar al Gobierno legítimo, repito, al Gobierno legítimo", recordó el presidente ruso. "No podíamos permitir que de allí los terroristas se filtraran al territorio de Rusia", añadió.
En este sentido, el inquilino del Kremlin aseveró que todas las fuerzas desplegadas en Siria de forma ilegítima "deben marcharse", e indicó que esto es aplicable también para Rusia en caso de que un nuevo Gobierno legítimo así lo considere.
Por otra parte, el líder ruso recuerda que la situación en Siria ha avanzado hacia una solución a través de medios políticos gracias a la creación del llamado Comité constitucional, organizado por Rusia, Turquía e Irán, y que próximamente daría los primeros pasos "bajo la égida de las Naciones Unidas".
En torno al tema sirio, el mandatario reconoce que Rusia colabora de una mayor forma con esos países que con Arabia Saudita, pero recalca que sin la contribución de Riad "habría sido absolutamente imposible lograr una tendencia positiva" en la normalización de la situación de Siria y de la región en general, en la que también ha participado activamente Abu Dabi.
Sin embargo, Putin enfatizó que, al final, es el mismo pueblo sirio el que tiene que llegar a un acuerdo que respete a todas las etnias, religiones y orientaciones políticas.
"Hasta la peor paz siempre es mejor que una buena guerra", indicó el jefe de Estado, que expresó su creencia de que "ya es hora de que Siria vuelva a formar parte de la familia árabe, de que se reincorpore a la Liga Árabe".
Ataques a refinerías sauditas
Previo a su visita del próximo 15 de octubre a Arabia Saudita —la primera que realiza desde 2007— Putin se ha referido al ataque contra las refinerías sauditas ocurrido el mes pasado, afirmando que recibió una solicitud del príncipe heredero, Mohamed bin Salmán, de participar en la investigación de las acciones.
"Yo dije que sí, que estamos dispuestos [...] Hasta que no se aclare quién está detrás de este acto, no es conveniente señalar a los culpables", indicó el líder ruso, precisando que la Inteligencia de su país no tiene indicios del origen del ataque. "Aunque usted no lo crea, no lo sabemos", afirmó el presidente a uno de los entrevistadores.
Consciente de que una serie de países señala a Irán como probable responsable de la ofensiva, entre ellos Arabia Saudita, Putin tocó el tema en una reciente reunión con el presidente iraní, Hasán Rohaní. "Sí, eso fue exactamente lo que dijo: que Irán no tenía nada que ver con esos ataques", señaló.
Además, el inquilino del Kremlin indicó que, "si alguien planeaba influir de este modo en el mercado del petróleo, su propósito no ha sido alcanzado", ya que tras "cierta fluctuación inicial [...] prácticamente en una semana los precios volvieron a la normalidad". Además, Putin ha subrayado que "este tipo de actos no benefician a nadie, incluyendo a aquellos que los preparan y los llevan a cabo".
Tras ser preguntado por el corresponsal del canal saudita si Rusia se uniría a los países que condenan el ataque contra las refinerías, en caso de que se revele que Teherán fue el culpable, Putin ha reiterado que Moscú condena "este tipo de actos, sin importar quién esté detrás de ellos". "Así es como lo dije. No puede haber otra interpretación", ha concluido.
Intereses de Irán
Rusia ha presentado una iniciativa para establecer un sistema de seguridad colectiva en la zona del golfo Pérsico, que pese a ser recibida por algunos con incredulidad es vista por Putin como una beneficiosa oportunidad de acercamiento para las partes. "Sabe, a veces lo importante no son las negociaciones en sí, sino un apretón de manos. Eso ya significa mucho", señaló.
Con ese mismo espíritu, el presidente ha rechazado cualquier posibilidad de que Moscú influya de forma alguna sobre Teherán.
"Rusia nunca se alía con nadie en contra de terceros. Construimos una relación bilateral que se basa en las tendencias positivas generadas por nuestros contactos; no buscamos crear alianzas contra nadie", aseveró el mandatario.
Rusia e Irán no solo son vecinos, enfatiza Putin, sino que la República Islámica "es una gran potencia regional" con una "antigua y profunda cultura" y sus diferencias o disputas con otros Estados deben resolverse a través del diálogo.
"Si queremos una agenda positiva, debemos partir del reconocimiento de los intereses legítimos de nuestros socios", indicó el líder ruso. "No estoy proclamando qué es legítimo y qué no, pero una gran potencia como Irán, que ha permanecido en ese territorio durante miles de años [...], no puede dejar de tener sus propios intereses, que hay que respetar", recordó.
En cuanto al Plan Integral de Acción Conjunta sobre el programa nuclear iraní (JCPOA, por sus siglas en inglés), Putin considera "no muy productivo" el panorama actual, en el que algunas naciones acusan de forma "injusta" a Irán de no acatar sus compromisos. Esto pese a que, según el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Teherán "cumple plenamente con todas sus obligaciones".
El mandatario añade que el programa iraní de misiles "es una cuestión que puede y debe llevarse a discusión", pero hace hincapié en que no hay lugar para "comprometer el progreso" que se ha logrado con el JCPOA. "No hay que confundir los huevos fritos con los dones divinos [...] evitemos mezclar una cosa con la otra", indicó Putin citando un dicho ruso.
EE.UU. y la carrera armamentística
En cuanto a la normalización de las relaciones con Moscú por parte de Washington, "todavía no se ha hecho nada" debido a la "agenda de política interna" con la que se mantiene ocupado el presidente de EE.UU., Donald Trump.
Uno de los temas que provocan discordia entre ambas potencias tiene que ver con las armas, subraya Putin, expresando su esperanza de que sea preservado "el último instrumento" que queda para limitar la carrera armamentística a gran escala: el Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (START III).
"La Administración estadounidense tiene nuestras propuestas. Pero no hemos recibido ninguna respuesta", señala Putin. "Si lo eliminamos, en el mundo no quedará nada en el ámbito de la restricción de armas ofensivas [...] el mundo será más peligroso y menos predecible de lo que es ahora", añade.
El mandatario espera que ambas potencias no entren en una nueva Guerra Fría, pero subraya que, "en cualquier caso, Rusia será la partemenos afectada" gracias a sus "prometedoras armas de próxima generación".
"Nadie en el mundo, excepto nosotros, tiene armas hipersónicas. Está claro que tarde o temprano las principales potencias del mundo las desarrollarán. Pero para entonces nosotros también diseñaremos algo nuevo", asegura Putin, indicando que los rusos por el momento pueden "pensar tranquilamente".
"No nos veremos arrastrados a gastos presupuestarios excesivos" en materia militar, asegura el presidente, pese a que, "lamentablemente", la situación ha desembocado en "una cierta carrera armamentística".
OTAN y las fronteras rusas
Al mismo tiempo, el inquilino del Kremlin ha dejado en claro la postura rusa en torno a las acciones de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
"No nos hace ninguna gracia que las instalaciones de un bloque militar se acerquen a nuestras fronteras", acotó.
Putin califica estos acercamientos militares de la OTAN, materializados en el despliegue de un sistema antimisiles en Rumanía y próximamente en Polonia, como una "actividad destructiva" que está destinada a "neutralizar las capacidades nucleares estratégicas" de Rusia.
"Obviamente, ese intento está condenado al fracaso [...] ahora que disponemos de los sistemas de los que hablé antes, esos movimientos ya no suponen ninguna amenaza para nosotros", aclaró.
En cuanto al origen del actual comportamiento de la Alianza, Putin ha sido claro. "A nadie le cabe ya duda de que la OTAN es simplemente un instrumento de la política exterior de EE.UU. Eso dicen en Europa. Eso dice el presidente de Francia. No es que yo me lo haya inventado", acotó el mandatario ruso.
Relaciones entre Rusia y EE.UU.
En el marco de la entrevista al presidente ruso, le preguntaron si espera que se den pasos para que mejoren las relaciones bilaterales entre Moscú y Washington, con base en las acciones de la administración de Trump y las declaraciones del mandatario estadounidense en su cuenta de Twitter.
"Lo siento, yo no tengo Twitter, por eso no sigo a nadie ahí. Por supuesto, de vez en cuando mi equipo me informa", ha respondido Putin. Ha agregado que "la opinión del presidente de Estados Unidos siempre es muy importante y siempre importa a mucha gente y al mundo entero, pero yo personalmente no lo leo en Twitter".
En el contexto de las perspectivas de las relaciones bilaterales, el presidente ruso ha subrayado que "todos sabemos qué dice el presidente Trump de las relaciones entre Rusia y Estados Unidos y de qué manera lo hace".
"Pero no reprochamos nada, porque vemos lo que está ocurriendo en la política interior de Estados Unidos", ha añadido Putin, aseverando que "es la agenda de política doméstica que no le deja al actual presidente adoptar medidas para mejorar drásticamente las relaciones entre Rusia y Estados Unidos".
Ante las elecciones presidenciales en EE.UU., que tendrán lugar en el 2020, el líder ruso ha subrayado que Moscú trabajará "con cualquier Administración tanto como ellos quieran".
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