En la presente edición del programa 'Entrevista', de RT, nuestro corresponsal y presentador Semión Sénderov ha tenido la ocasión de conversar con Alexánder Schetinin, director del Departamento de América Latina del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia.
Schetinin considera que 2021 no fue un año sencillo para la región debido al covid-19 y a sus consecuencias socieconómicas. "Vemos que a raíz de la pandemia muchos modelos neoliberales en su mayoría mostraron su falta de capacidades para responder a los retos que se presentaron", indicó, resaltando, asimismo, que surgió una necesidad de caras nuevas en la política, como se desprende del resultado de las elecciones que hubo en varios países, por ejemplo, Perú, Chile y Honduras.
El miembro de la Cancillería rusa destaca que Moscú suministró sus vacunas contra esa enfermedad a muchos países de América Latina, organizó la producción de Sputnik V en Argentina, Brasil y México y propuso el establecimiento de los llamados corredores verdes para que la cooperación internacional en el campo de la medicina y la biotecnología quede libre de restricciones y sanciones.
"Cooperación práctica mutuamente beneficiosa"
"Nosotros no quisiéramos dividir a América Latina entre la izquierda y la derecha. En nuestro caso estamos más interesados en un enfoque desideologizado, pragmático, sobre la base de relaciones de amistad, de una cooperación práctica mutuamente beneficiosa", explicó.
Asimismo, aseguró que Rusia, a diferencia de EE.UU., no considera el continente latinoamericano como un "campo de juegos geopolíticos" ni interfiere en los asuntos internos de la región, como los procesos electorales. En este sentido, asegura que el hecho de que en ocasiones se acuse de ello a Moscú es un ejemplo de rusofobia.
Schetinin señala que la política de sanciones se ha convertido en un "quehacer cotidiano" del país norteamericano y de la Unión Europea. En particular, se refiere al caso del bloqueo económico y financiero de más de 60 años impuesto sobre Cuba, que, en su opinión, es un "ejemplo obvio de la hipocresía, de un carácter coyuntural de la política externa de EE.UU.".
¿Adiós a la globalización?
El director del Departamento de América Latina del Ministerio de Exteriores asevera que estas medidas de Occidente contra su país contravienen todas las leyes del desarrollo mundial, porque durante muchas décadas se hablaba de un mundo globalizado y ahora sus mecanismos e instituciones están en proceso de destrucción debido a las recientes acciones adoptadas por Occidente.
"En contra de nosotros se ha declarado una guerra económica, humanitaria, a gran escala y sin reglas", comentó. "La presión de sanciones en contra de Rusia no tiene precedentes en la historia mundial. Se han violado todos los principios de la economía de mercado", lamentó, no sin advertir que las consecuencias de ello ya son visibles en la vida económica y social del mundo entero.
A este respecto, el entrevistado comentó que desde Moscú están convencidos de que la fuerza de los argumentos y de la verdad histórica está con ellos, por lo que piensan que su economía se adaptará a la nueva situación y Rusia consolidará su soberanía. "Vamos a salir de la crisis con una conciencia más sana, sin ilusiones de que Occidente puede ser un socio seguro y se puede depender de él", subrayó.
Por último, el invitado habló sobre las relaciones comerciales entre Rusia y América Latina, el turismo ruso en la región —especialmente en Cuba, México, República Dominicana y Venezuela— y la cooperación técnico-militar en esa parte del planeta, subrayando que no alberga presencia militar rusa.
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