Entre Rusia y los países occidentales "existe una cortina de hierro mediática", reconoce el diplomático. La delegación de Moscú en la ONU hace "todo lo posible para dárselo a conocer a la gente" y, con este fin, ha invitado al Consejo de Seguridad a varios testigos presenciales de los hechos producidos en Ucrania, quienes "ofrecieron sus testimonios sobre lo que está ocurriendo, pero lo ignoran todo".
"En cuanto al papel de Rusia, nunca se podrá borrar a Rusia del mapa mundial, le guste o no", añade Nebenzia, recalcando que su país "siempre será un actor importante en la política internacional". Al mismo tiempo, afirma que su delegación no se opone a una reforma del Consejo de Seguridad, porque "el mundo está cambiando".