Seymour Hersh destapa los motivos de Estados Unidos para volar los Nord Stream

"Rusia no necesitaba una guerra, tenía relaciones con Occidente y esto le era beneficioso", comenta Seymour Hersh, periodista estadounidense y ganador de un Pulitzer, en una entrevista exclusiva concedida a RT. ¿Se provocó el sabotaje en el Nord Stream con fines políticos? Solo Snowden denunció la violación directa de uno de los puntos más sensibles de la Constitución, ¿por qué nadie más en EE.UU. lo hizo?

EE.UU. "no tiene incentivos para investigar" la explosión de los gasoductos Nord Stream, ni para negarla, declaró el reconocido periodista e investigador estadounidense Seymour Hersh durante una entrevista exclusiva con el programa 'Going Underground' de RT.

En su primera entrevista con una cadena internacional, tras publicar un revelador artículo en el que responsabiliza a Washington como principal autor del sabotaje de los gasoductos Nord Stream, el ganador del premio Pulitzer en 1970 declaró que "es bastante cierto que esta presidencia [de EE.UU.] se ha visto sorprendida en cierto modo por el hecho de que les han descubierto con lo del gasoducto".

No lo están admitiendo y no creo que lo hagan nunca debido a las implicaciones de hacerlo

Respecto a la situación en Europa tras la explosión de los gasoductos y la interrupción del suministro de gas ruso, Hersh sostuvo que "lo que de verdad preocupa a Europa es el próximo invierno". Según sus palabras, en el período tras el sabotaje de los Nord Stream, que tuvo lugar en septiembre del año pasado, y el comienzo del invierno, los países europeos "han conseguido aumentar la cantidad de combustible que tienen almacenado". "Pero les sigue preocupando el próximo invierno. Y estoy seguro de que la gente en Europa entiende la situación. […] Se ha desatado una tormenta, han estado pasando un montón de cosas en Alemania por esto", señaló el periodista.

Investigación de la explosión

Al ser preguntado sobre las acusaciones de engaño en su contra tras la publicación de la investigación, el reportero recordó su trabajo al destapar la Matanza de My Lai en 1969. "Muchos en el cuerpo de prensa estaban al tanto de ese tipo de cosas, pero si trabajas allí, y puedo entenderlo, podría ser peligroso hacer ese tipo de reportajes", afirmó en este contexto. Indicó que entonces "más de la mitad del país pensó que estaba mintiendo", reiterando que pasó "por eso incluso en el caso de un reportaje sobre un asesinato en masa, que es tan visible".

En cuanto a la investigación de la voladura de los Nord Stream, Hersh mencionó el gran poder que el presidente de EE.UU. tiene sobre los servicios de inteligencia y su capacidad de recibir "un permiso total para tener acceso a la inteligencia de señales". "Hay tres grandes organizaciones de inteligencia que tienen la capacidad de acceder a todo esto. Y no han emitido ni una sola orden. No han pedido ninguna evaluación", destacó.

Los que están en la Casa Blanca no solo no tienen ningún incentivo para investigar la historia, es que ni siquiera tienen incentivos para negarlo

Recordó las palabras del asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, el funcionario que, según Hersh, "tanto tenía que ver con la organización de la operación inicial", que no hablaría sobre una investigación propiamente estadounidense del suceso.

Los suecos y los daneses llevaron a cabo una investigación en septiembre y octubre, y llegaron a la sorprendente conclusión de que, efectivamente, algo sucedió bajo el agua y fue una explosión

Además, el aclamado reportero señaló que había hablado con personas en el negocio de los gasoductos, "al menos con una en particular", destacando que "lo único de lo que están convencidos, es de que, por supuesto, Rusia no lo hizo porque habría sido absolutamente absurdo por su parte".

De acuerdo con sus declaraciones, a lo largo de décadas, incluso durante el mandato de John F. Kennedy, había la preocupación de que Rusia, debido a su enorme cantidad de gas natural y petróleo, utilizara los recursos "como un arma, un arma política". "Es una lucha que ha sucedido desde la Segunda Guerra Mundial", reiteró.

Acuerdos de Minsk

Al ser preguntado sobre el objetivo de la explosión de los gasoductos mientras los Acuerdos de Minsk, que se firmaron para resolver la situación en Donbass, estaban en vigor, Hersh señaló que "los logros de los Acuerdos de Minsk son bastante lamentables".

Así, citó las declaraciones de la excanciller alemana, Angela Merkel, quien "dijo que todo el mundo sabía que eso solo daba a la OTAN la oportunidad de hacer acopio de armas".

Snowden fue el único en denunciar la violación de la Constitución 

En el marco de la entrevista, el reportero comentó también el caso del exanalista de la Agencia de Seguridad Nacional de EE.UU. (NSA, por sus siglas en inglés) y de la CIA, Edward Snowden, quien destapó en el 2013 el espionaje digital masivo de Washington a su ciudadanía. Afirmó haber conocido que estaba prohibido interceptar las comunicaciones de un estadounidense sin una orden judicial, pero "lo que Snowden descubrió, lo que le contaron y de lo que se enteró como consultor, fue que habían cambiado la ley", ampliándola "para que ahora pudieran espiar".

Hersh detalló que en aquel entonces había unas 25.000 personas trabajando para la NSA y "probablemente el 10% sabía directamente que las reglas habían cambiado".

Solo uno denunció una violación directa de uno de los puntos más sensibles de la Constitución estadounidense: la libertad de expresión, el derecho a no ser vigilado sin una orden judicial

"Rusia no necesitaba una guerra"

Repasando el entorno internacional antes del inicio del operativo militar ruso en Ucrania y el sabotaje de los Nord Stream, Hersh destacó que la retórica antirrusa de Biden aumentó en el 2021.

"Rusia no necesitaba una guerra. Rusia tenía relaciones con Occidente, hacía negocios, y esto era beneficioso", recordó el periodista, añadiendo que "la gente estaba muy abierta respecto a Estados Unidos". Sin embargo, la retórica de Washington contribuyó a la escalada.

¿Cuáles eran los objetivos de EE.UU.?

Continuando con el tema de la implicación de EE.UU. en la explosión de los gasoductos, el reportero destacó que el presidente de EE.UU. "nos está mintiendo sobre algo que él mismo autorizó".

El presidente nos está mintiendo sobre algo que él mismo autorizó

Afirmó que en septiembre del año pasado ya estaba claro que "es muy poco probable" que Ucrania se haga con la victoria en el conflicto y sea capaz de hacer frente a los rusos. "Las cosas no van bien en absoluto. Así que Biden le dice a Europa Occidental, y sobre todo a los alemanes: 'Estamos muy preocupados de que posiblemente decidan no apoyarnos plenamente, porque están recibiendo combustible de Rusia'", dijo Hersh. De acuerdo con sus palabras, Washington estaba preocupado de que Europa levantara las sanciones y volviera a recibir el gas ruso.

Hersh recordó que el propio mandatario estadounidense prometió durante una rueda de prensa detener el gasoducto Nord Stream 1, haciendo hincapié en que saben "cómo hacerlo" y pueden hacerlo.

"En ese momento, a los chicos del grupo (que estaba llevando a cabo la misión) les molestó porque se suponía que iba a ser una operación encubierta. Y, cuando terminaron su trabajo, lo hicieron realidad, colocaron los explosivos con la ayuda de buzos de la Armada, simplemente los explosivos quedaron allí durante meses", declaró el periodista.

Detalló que los explosivos fueron colocados en junio, "cuando parecía que la guerra les iba bien a los ucranianos", pero posteriormente, en septiembre, se hizo evidente de que "tenían problemas serios y que no iba a ser pan comido para los ucranianos". "Y en ese momento el grupo que lo había llevado a cabo, se dio cuenta de que lo había hecho con fines políticos y punto. Y que no ayudaría al transcurso de la guerra", enfatizó.

Hersh explicó que EE.UU. "lo hizo para evitar que Alemania y Europa Occidental abrieran el gasoducto en caso de que el invierno llegara pronto". "El Gobierno alemán aprobó las sanciones, paró el gasoducto, pero tenía el derecho a abrir el nuevo [el Nord Stream 2] y Biden no quería esto", resaltó.

Este fue el objetivo de la misión, que consistía en asegurarse de que Europa y Europa Occidental siguiera apoyando a la OTAN y siguiera suministrando armas para llevar a cabo lo que es evidentemente una guerra subsidiaria contra Rusia que se está librando ahora mismo