Patrimonio minado

Libia sigue siendo un país cruzado por heridas de guerra, un país partido en tres. Pero incluso en los lugares que ya no viven combates directos, los atentados terroristas y las minas dejadas por los bandos en conflicto siguen sembrando el miedo. Un grupo de voluntarios civiles, poniendo en riesgo sus propias vidas, se han unido a las fuerzas armadas para dedicar todo su tiempo libre a desactivar los explosivos que los combates dejaron atrás.