"Se creará una divisa que sea intercambiable por una cesta de materias primas"
En esta nueva edición del programa, los presentadores Max y Stacy abordan algunas controversias relacionadas con el bitcóin y otras criptodivisas.
Según Max, las criptodivisas pueden representar una amenaza para ciertos modelos de negocio. "Esta tecnología acaba con las comisiones", comenta el presentador, subrayando que hay quienes, como el abogado, divulgador y escritor estadounidense Jim Rickards, son contraroas al bitcóin, pero, al mismo tiempo, intentan mostrarse favorables a la criptodivisa. En este sentido, el presentador recuerda que Rickards habla de "divisas alternativas", de la "tecnología financiera alternativa que existe en Asia", entre otras cosas, "todo por no reconocer que, en el fondo, está a favor del bitcóin".
Asimismo, subraya que "las ofertas iniciales de monedas constituyen una parte importante del desarrollo de este nuevo ecosistema de las criptodivisas y los tokens que está obligando a capitular a la Comisión de Bolsa y de Valores y al resto de organismos reguladores". Sobre esta cuestión, recuerda que dicha comisión "ha citado a declarar a los responsables de 80 empresas dedicadas a la emisión de tokens y de ofertas iniciales de monedas".
En la segunda parte de programa Max Keiser habla con Mitch Feierstein, autor de libro Planeta Ponzi, que cree que "2018 va a ser el año de las materias primas". En cuando al dólar, el invitado subraya que esta divisa "ha vivido tiempos mejores" y sostiene que "su hegemonía ya es cosa del pasado". Además, hace notar que el euro también tiene sus problemas. "Con estas cantidades récord de deuda emitida por parte de Estados Unidos, el dólar acabará bajando, porque el país no será capaz de devolver toda esa deuda", afirma.
Asimismo, el especialista señala que las materias primas como el oro no pierden su valor. "Nos daremos cuenta de que el oro lleva entre 5.000 y 6.000 años siendo una divisa, y de que siempre acabamos recurriendo a él", recalca el invitado.
"No sé si será solo China o una suma de países como China, Rusia y otros países los que crearán una divisa que sea intercambiable por una cesta de materias primas; lo que está claro es que ocurrirá y, además, no a mucho tardar, sustituyendo al dólar", indica Feierstein.