"El resto del mundo ya no confía en el análisis de EE.UU. cuando se habla de cosas tan importantes como tratar de averiguar por qué estos aviones se estrellan o no pueden mantener el rumbo", señala Max Keiser, quien sostiene que el papel de Washington en el espectro político y comercial a nivel global se empequeñece por casos de este tipo.
Como indica Stacy Herbert, tras el siniestro del avión de Ethiopian Airlines, EE.UU. "fue el último país en ceder ante la posibilidad de que ese modelo de avión no fuera seguro" y lo hizo solo al ver que ya perdía a Canadá, que lo reconoció después de que lo hicieran todos los demás países. "Ha sido la primera vez en la historia de la aviación moderna en que la FAA, la Autoridad Federal de Aviación de EE.UU., no toma la iniciativa", razona la conductora de 'Keiser Report'.
Cuando un imperio pierde su poder
Según Max, en EE.UU. hay "un falso sentimiento de seguridad" mientras invierten dinero en el dólar, pero "están al borde del precipicio". "Llegará un momento en que el apoyo al dólar se verá erosionado y entonces podremos ver el verdadero impacto que tiene que un imperio pierda su poder", opina.
En ese sentido, Stacy recuerda que Alemania se vio obligada a empezar a desarrollar una alternativa al sistema interbancario SWIFT cuando EE.UU. empezó a interferir en sus asuntos comerciales con Irán. "Todos los imperios se vuelven demasiado arrogantes: no les gusta que les desobedezcan", afirmó Stacy en referencia a EE.UU.
La presentadora señaló que ahora Washington comercia con "derivados tóxicos": "En los acuerdos comerciales agrícolas lo que se lleva la gente es pollo clorado y carne cargada de hormonas". Mientras EE.UU. se centra en generar beneficios, la autorregulación de las industrias nacionales ya da sus frutos: el sistema sanitario de EE.UU. "parece sacado de una novela de Dickens o incluso peor, porque están cobrando como si fuese un producto de lujo pero no ofrecen absolutamente nada a cambio, solamente ofrecen el equivalente sanitario al pollo clorado", opina Stacy.
"En nuestro país la muerte y la tortura no cuentan, mientras que nuestros socios comerciales se preocupan cada vez más por lo mismo", concluye.
Efecto Kardashian por "dinero falso"
Por su parte, Max observa el hecho de que para algunos el motivo de orgullo parece ser el "dinero falso". "Una de las Kardashian se convirtió en la millonaria más joven de la historia gracias al dinero falso. Los hijos de las personas involucradas en los escándalos de las admisiones universitarias tienen canales de YouTube con millones de seguidores, ganan millones de dólares por publicar en Twitter o Instagram promocionando perfumes y otros productos, vendiendo una imagen impostada de riqueza", declaró.
A su modo de ver, EE.UU. se desvió hacia el "fundamentalismo mercantil" creyendo "en el precio y en su manipulación incluso más que en los beneficios, porque estos son el resultado de la contabilidad, que a su vez es el producto de cuatro grandes empresas contables a las que puedes pagar para que te devuelvan el resultado contable que más te convenga".
"En EE.UU. tenemos un sistema que hace de la muerte y la prisión el principal producto del sistema capitalista, algo que nada tiene que ver con Europa, donde todavía nos podemos comer un buen queso", concluye Max.