Programas
"EE.UU. se ha vuelto loco al haber iniciado una guerra comercial con México, China y otra con Europa"
En este episodio del Keiser Report, Max y Stacy discuten el hecho de que las guerras comerciales, los aranceles y las sanciones se están librando en múltiples frentes en el extranjero, mientras que en las calles de Los Ángeles no se encuentra una solución al problema de los sintechos. En la segunda mitad, Max entrevista a Konstantín Gurdzhíev, de Macroview.eu, sobre la posible solución a la situación en California, la desglobalización en los días de Trump, el Brexit y los 'chalecos amarillos'.
Stacy inicia el programa comentando que "el Imperio estadounidense se ha vuelto loco", al haber "iniciado una guerra comercial con México, China y otra con Europa", además de las "amenazas de Washington a Alemania por las sociedades vehículo que ha creado para comerciar con Irán en el ámbito farmacéutico".
Max, por su parte, advierte que la guerra comercial puede desembocar en conflictos armados, pero señala que el actual enfrentamiento entre Pekín y Washington en el ámbito comercial es consecuencia de la guerra de divisas entre las partes que comenzó hace unos 15 años. "Esa guerra de divisas nos ha llevado a una serie de guerras comerciales, con un Trump que está declarando la secesión de Estados Unidos respecto a la economía mundial, adentrándonos en una era de neomercantilismo que deja atrás la globalización, el monetarismo y la dolarización", agregó.
"El Imperio estadounidense se ha vuelto paranoico y sospecha de todo el mundo, como si todo el mundo lo estuviera engañando", acotó Stacy.
En cuanto a los efectos para la economía estadounidense por la imposición de aranceles a los productos importados de otros países, el invitado de este episodio, Konstantín Gurdzhíev, opina que las consecuencias son negativas para los ciudadanos de la nación norteamericana. Citando datos de un reciente informe de la Reserva Federal, Gurdzhíev asegura que los que están pagando los aranceles son las familias estadounidenses, "con una pérdida de 140 dólares anuales por familia".
Asimismo, advierte que esa cifra se incrementará hasta los 889 dólares en caso de que se imponga una nueva ola de aranceles contra el gigante asiático. "Es un disparate decir que las familias de Estados Unidos se benefician de cualquier tipo de impuestos comerciales que recaude el Tesoro", criticó.
comentarios