"Los contratistas de defensa son las empresas que más dinero derrochan del mundo"

En este episodio de 'Keiser Report', Max y Stacy analizan la última fase de la guerra permanente y cómo los mercados del bitcóin, el oro y el petróleo responden al asesinato del general Soleimani. También estudian las acciones de la Reserva Federal para eternizar el mercado de acuerdos de recompra. En la segunda parte, Max habla con Michael Pento, de PentoPort.com, que no es ningún fanático del oro, pero cree que muchas de las acciones de los gobiernos justifican una posición larga en ese metal.

En esta edición del programa, Max y Stacy hablan de la influencia de la escalada de tensiones en el Oriente Medio en el complejo industrial-militar.

Stacy explica que, en marzo de 2007, el general Wesley Clark dijo que el plan era que "Estados Unidos invadiera unos siete países durante los años siguientes y que el último de todos sería Irán". Según Stacy, en unas gráficas que muestran cómo cambiaron las acciones del mercado, se puede ver que "no se prestó demasiada atención a los proveedores de armamento, porque aquel era uno de los países que el general Wesley Clark mencionó junto después de Irak, Somalia y Sudán".

"Creo que en octubre del 2011 los inversores vieron que realmente íbamos a por Irán y que de ahí viene el cambio en la tendencia de la gráfica", añade la presentadora.

Por su parte, Max destaca que "los mercados tienen la capacidad de predecir lo que va a ocurrir en unos años", de tal forma que "cuando uno ve las gráficas del mercado de valores, puede afirmar que, efectivamente, los mercados nos indican que una invasión de Irán o algo semejante a una guerra con ese país está a punto de ocurrir". "Es el mercado de valores el que se encarga de reflejar dicho vaticinio", subraya.

En este sentido, Max opina que los contratistas de defensa son las empresas que "derrochan más dinero del mundo"

"Es un método maravilloso si uno quiere tirar a la basura la mitad de cada dólar que se recauda en impuestos en Estados Unidos. Todo ese dinero va a parar a los contratistas de defensa estadounidenses, y si uno quiere emitir otros 5, 6 ó 10 billones de dólares, lo único que tiene que hacer es dejar a estos tipos sueltos y que salgan ahí fuera, porque con eso conseguiremos no tener más remedio que emitir otros 10 ó 15 billones de dólares para que las cifras del mercado de valores suban otro 20 ó 30 % sin comerlo ni beberlo", comenta el presentador.