La inminente caída del petrodólar y la oportunidad de Rusia de ganar la "partida de póker geopolítico del petróleo"

En este episodio de 'Keiser Report', Max y Stacy hablan del comentario de Roy Sebag, de GoldMoney.com, de que el inicio de la guerra de precios del petróleo señala el fin del sistema del petrodólar. En la segunda parte Max entrevista a Mitch Feierstein, de PlanetPonzi.com, sobre cómo la Reserva Federal trató de desmontar una estafa Ponzi y fracasó. A la luz de la volatilidad actual, Feierstein hace sus predicciones sobre los mercados de materias primas conforme la deuda crece y llega el pánico.

Max Keiser y Stacy Herbert abordan la actual guerra del petróleo que libran Arabia Saudita y Rusia a raíz del precio del barril, que podría desembocar en una no muy lejana caída del petrodólar.

La semana pasada, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) propuso a sus integrantes realizar un recorte de la producción petrolera, pero fue rechazada por Rusia, a pesar de la poca demanda de hidrocarburo a nivel mundial. En consecuencia, Arabia Saudita bajó los precios oficiales del petróleo, lo que llevó a un desplome del 30 % de los mercados financieros mundiales, que luego experimentaron una leve subida, explica Stacy.

En opinión de Keiser, la situación arriba descrita involucra a "los actores necesarios" —Arabia Saudita, Rusia y Estados Unidos— para que el dólar pierda muy pronto su posición como "unidad contable y moneda de la reserva mundial", que convirtió a EE.UU. en un "imperio de la deuda" luego de que, a comienzos de la década de 1970, cambió a un sistema basado en el petrodólar porque ya no podía responder a las obligaciones con sus acreedores con oro.

Ya que tanto el petróleo como el resto de materias primas se valoran en dólares y Washington obtiene ganancias por cada transacción hecha en cualquier parte del mundo, la decisión de Riad de rebajar 10 dólares al crudo no le cayó bien. Al reino árabe le es conveniente dada su "brutal" deuda y el bajo costo de producción que le representa: "Menos de tres dólares" por barril, subraya Max.

¿Una nueva moneda?

Es este escenario Moscú también resulta afectado —gasta 15,50 dólares por barril—, pero recordando que "no tienen ninguna deuda y además tienen muchísimo oro", su negativa a la propuesta de la OPEP le da "muchas posibilidades de ganar en la partida de póker geopolítico del petróleo". Todo esto estimularía la llegada de una nueva moneda: "Quizá una moneda respaldada por el oro o el petróleo de otro país", asegura el anfitrión.

Es probable que EE.UU. trate de rescatar la situación imprimiendo todavía más dinero, pero eso solo hará que el dólar "se devalúe todavía más" en los mercados mundiales y se dispare el valor del oro, y "Rusia tiene mucho", dice Max.

Rusia posee una gran cantidad de reservas en el mercado de divisas y una riqueza nacional de oro y otros recursos que "haría palidecer a cualquiera". Además, mientras que el 87% de las exportaciones de Arabia Saudita son de petróleo, en Rusia apenas el 53% están relacionadas con el petróleo y la energía, así que tienen una mayor diversificación, detalla Stacy.