La Reserva Federal de Estados Unidos fracasa en sus dos tareas fundamentales: alcanzar el pleno empleo y mantener la estabilidad de los precios, y en lugar de esto se limita a imprimir dinero constantemente para rescatar a los bancos, lamenta Max Keiser en la edición de 'Keiser Report' de este sábado.
"Eso nos lleva de cabeza a un estado de corrupción, malas inversiones, brecha de riqueza e ingresos y, como acabamos de ver, estanflación", opina el presentador, quien culpa a la Reserva Federal de la "falta de honestidad" y recuerda que las grandes tasas de desempleo en el país y una alta inflación son circunstancias "estructurales y cíclicas".
"Está claro que nos dirigimos a una catástrofe de grandes proporciones", asevera Max, indicando que "las líneas de suministro y los pilares fundamentales del capitalismo del libre mercado en EE.UU. han saltado por los aires" por culpa de las malas inversiones, la corrupción y "el capitalismo de amiguetes".
Ford ya experimenta la escasez de componentes electrónicos que, según previsiones, se mantendrá hasta finales del próximo año, pero el Gobierno norteamericano contestará al existente problema de suministros imprimiendo más dinero, sostiene el presentador.
"Todo esto es un 'apartheid' financiero. Nosotros tenemos que pedir dinero prestado pagando un 17 % o 18 % con nuestras tarjetas de crédito, pero a Warren Buffet se lo dejan al 0 %", resume Max, agregando que "no hay ninguna diferencia entre esto y vivir en un gueto, porque el resultado es el mismo: pobreza y muerte". "La esperanza de vida ha caído, la mortalidad infantil ha subido, la brecha de riqueza e ingresos es cada vez mayor", concluye.
"Se dice mucho aquello de que la extorsión y la impresión monetaria que practica la Reserva Federal son crímenes sin víctimas, pero cuando pienso en las 90.000 muertes que hubo el año pasado por las sobredosis de opiáceos, lo único que puedo pensar es que [el presidente de la Reserva Federal, Jerome] Powell tiene las manos manchadas de sangre; porque esas muertes son el resultado directo de las malas inversiones, la impresión de dinero y las políticas económicas sin control que predica como un charlatán", razona Max.