La salida de Dilma Rousseff de la presidencia de Brasil no solo marca un antes y un después en la política de ese país, sino que traza un punto y aparte a las políticas de izquierda que insuflaron Lula, Chávez y otros carismáticos líderes.
Esta tendencia caló hondo en más de 10 países de la región y hoy en día muchos de ellos le dan la espalda. Ahora se mira a la derecha, al neoliberalismo. ¿Estamos ante un fin de ciclo? ¿Las políticas populistas o socialistas están plegando velas? ¿A qué se debe? En este episodio de 'El Zoom', Javier Rodríguez Carrasco busca la respuesta.
La razón para la destitución de Dilma Rousseff
El programa recaba las opiniones de personas, criterios para todos los gustos. Quizás ha sido el descontento de la clase media, la gran crisis económica que atraviesa el país, unas bases de crecimiento poco sólidas o las corrientes neoliberales y las transnacionales las que tuvieron que ver con la salida de Rousseff.
El politólogo Andrés Malamud cree que el problema de fondo es la mala redacción de la constitución brasileña. Señala que Dilma Rousseff es una de las pocas políticas de su país que no está acusada de corrupción, que sin embargo fue destituida por un "desmanejo procedimental que da lugar a un juicio político, no penal, no criminal". Malamud cree que Rousseff fue destituida por motivos económicos y políticos. "La constitución brasileña es un desastre y este desastre fue bien aprovechado por tres cuartos de los diputados y senadores para deshacerse de una presidente impopular".
Lo sucedido en Brasil, ¿la piedra de toque a una etapa histórica?
En Argentina, acabaron 12 años de kirchnerismo; en Venezuela, Nicolás Maduro sostiene a duras penas el legado chavista con una Cámara en la que la voz cantante la lleva la oposición; en Colombia, la izquierda tiene casi un papel marginal y en Chile, Bachelet ya tuvo que cambiar a todo su gabinete para evitar una crisis política. Estos son solo algunos de los estados que el presentador recuerda para ilustrar cómo la postura de izquierda está dejando paso de nuevo a gobiernos con políticas económicas y tendencias diferentes.
"Pero es que esta derecha no llega con golpes de Estado militares o dictaduras, sino con procesos judiciales, como dicen, dentro del marco legislativo, o votaciones democráticas, poniendo fuera de juego a los garantes de la izquierda", indica.
Rodríguez Carrasco apunta que "es innegable" que la llegada de los gobiernos de izquierdas trajo una bonanza económica. Tanto que incluso, según el Banco Mundial, en el periodo de 2000 a 2012 la pobreza en la región (entendida como aquellas personas que ganan cuatro dólares o menos al día) cayó del 41% al 23%. Países como Venezuela redujeron la pobreza en 22 puntos; Bolivia en más de 30; Brasil en 14 y Argentina y Chile en poco más de dos dígitos.
¿Cuál es el origen del giro?
El presentador indica que muchos de estos países que giran a la derecha miran ahora las alianzas con EE.UU. como posibles, y no quieren ver a Washington como ese enemigo injerencista que se escucha en los discursos de Evo o Correa. Rodríguez Carrasco sostiene que aunque esto quizá sirva de desarrollo para estos países, no hay que olvidarse de socios tan importantes como China o Rusia.
"Puede ser un arma de doble filo en el que las corporaciones y transnacionales estadounidenses se hagan con el control de países enteros", alerta.
Asimismo, el periodista apunta a la corrupción como otro de los factores. "Si no directamente, sí que ciertos allegados de los líderes o miembros de sus partidos se han visto salpicados por escándalos de corrupción, malversación de fondos o recorte de las libertades. Enemigos y objetivos a combatir y de los que acusaban a sus predecesores los gobernantes de izquierdas", añade.
La nueva realidad de América Latina
¿Ha colapsado el modelo de izquierdas? El sociólogo y consultor político Eduardo Castillo cree que existe un cambio de tendencias que tiene que ver con un fin de ciclo económico. Según Castillo, los países latinoamericanos, que generalmente dependen mucho de las exportaciones de las materias primas, han visto mermadas sus capacidades para seguir financiando la forma de gobierno que estuvo predominando durante los últimos quince años.
El experto señala que los países grandes nunca han cesado su trabajo en América Latina y que su futuro dependerá de las relaciones que se mantengan con grandes socios como Rusia o EE.UU. "Definitivamente considero que es un fin de ciclo económico de las materias primas a precios altos que había durante mucho tiempo".
Un modelo desgastado
"Creo que en la política todo se mueve de forma cíclica. Ahora la derecha lleva otro traje, otro atuendo. Pero estoy seguro de que si este modelo de izquierda se ha desgastado llegará renovado y con la lección aprendida", señala Rodríguez Carrasco.
Lo verdaderamente importante es que se gobierne para la gente, del presente y el del futur, concluye el presentador.