"¿Assad ha atacado con armas químicas? No se necesitan pruebas": Así comienza Javier Rodríguez Carrasco a describir el "laboratorio" en el que se ha convertido la guerra en Siria. "Bienvenidos a una era en la que la verdad no cuenta", lamenta el anfitrión de 'El Zoom' en esta nueva edición del programa.
Rodríguez Carrasco repasa la reacción internacional al supuesto ataque químico del pasado 7 de abril en Duma, en la que "de repente, apareció el 'Señor Cloro'" mientras los rebeldes eran evacuados de la ciudad siria. "Duma, el último bastión rebelde de importancia, estaba bajo control [del Ejército sirio]… pero el que hubiera un final feliz no les convenía a muchos", subraya el anfitrión.
El periodista señala que, detrás de las imágenes de niños llorando, se notan múltiples inconsistencias en la historia que cuentan los medios occidentales. "Es un máster en hipocresía, ¿no lo ven?", asevera Rodríguez Carrasco, quien se pregunta por qué los rusos pueden interferir en Washington con 'hackeos' "pero nadie puede sospechar que esto haya podido ser orquestado".
"Pasó hace un año.. y vuelve a pasar hoy", recuerda el anfitrión la presunta ofensiva química de Jan Sheijún en abril de 2017, caso en el que EE.UU. se basó para bombardear una base aérea siria. "Se ve que algunos siguen metiendo la mano en Siria: los agentes externos que no veían muy bien eso de que Donald Trump quisiera retirarse de ahí".
Al respecto, este presentador explica que a muchos les conviene que el conflicto continúe: a Israel para seguir señalando a Irán, a Arabia Saudita para minimizar la figura de Bashar al Assad, a EE.UU. para seguir invirtiendo en armas y presionar a Rusia. "Siria se está convirtiendo en un laboratorio en el que muchos experimentan… como si las vidas de inocentes y el futuro de un país fueran un juego".
"¿Por qué siempre que hay posibilidades de una paz llega el 'Señor Cloro'?": el anfitrión del programa dirige esta pregunta a los rebeldes en Siria, a los que se les ofrece una salida de Duma, unas elecciones amparadas por la ONU… "pero que prefieren seguir recibiendo órdenes de quienes les interesan poco sus vidas".