"No empecé este proyecto con la idea de impedir que el mundo cambie. Simplemente quería crear un documento visual para que nosotros y las generaciones venideras recuerden lo hermoso que fue el mundo humano", escribe Nelson citado por el portal LiberalAmerica.org.
El proyecto, llamado 'Antes que desaparezcan', busca conservar, aunque sea en imágenes, toda la diversidad de la especie humana.
Nelson viajó por el mundo buscando a tribus indígenas amenazadas por la extinción, y pasó unas semanas con ellas. En la página web de su proyecto el fotógrafo cuenta: "Lo más importante es que quise crear un ambicioso documento estético y fotográfico que resistirá la prueba del tiempo".
Presentamos alguna de estas tribus, cuya lista completa pueden encontrar aquí.
Los chukchis
Este pueblo paleosiberiano habita una zona muy extensa y casi despoblada de Rusia entre el mar de Bering y el mar de Chukchi, incluyendo la península de Chukotka. Su entorno y su cultura tradicional se vieron gravemente alterados por los ensayos de armas y la contaminación durante la época soviética.
Debido a la dureza del clima y la dificultad de la vida en la tundra, la hospitalidad y la generosidad son muy apreciadas entre los chukchis. Ellos creen que todos los fenómenos y objetos naturales tienen sus propios espíritus. Su estilo de vida tradicional todavía sobrevive, pero está siendo reemplazado.
Los ladakh
La región de Ladakh es un desierto frío del estado de Jammu y Cachemira, en el norte de la India. Se divide en el distrito de Kargil, de mayoría musulmana, y el distrito de Leh, principalmente budista. Los habitantes de Ladakh tienen un rico folclore, con tradiciones que se remontan a la época anterior al budismo.
Como la temporada de cultivo en el Himalaya solo dura cuatro meses, ladakh de todas las edades pueden participar y ayudar en el cultivo de tierras. Durante los ocho meses de invierno el trabajo es mínimo y las fiestas y celebraciones se suceden continuamente, dándoles a los miembros de este pueblo la oportunidad de lucir sus 'goncha', el vestido tradicional.
Los nénets
Los nénets son un pueblo de criadores de renos que habita en la península de Yamal, en el noroeste de Rusia, y que durante más de un milenio han prosperado a temperaturas de -50°C en invierno y 35°C en verano. Su migración anual les lleva a recorrer más de 1.000 kilómetros, 48 de ellos a través de las aguas heladas del río Ob.
El descubrimiento de yacimientos de gas y petróleo en la década de los 70 y las cada vez más numerosas infraestructuras en la península de Yamal amenazan su estilo de vida tradicional.
Los kazajos
Los kazajos son descendientes de las tribus turcas, mongoles, indoarias y hunas que poblaron el territorio entre Siberia y el mar Negro. Es un pueblo seminómada que desde el siglo XIX recorre las montañas y los valles del oeste de Mongolia con sus rebaños.
El antiguo arte de la caza con águila es una de las muchas tradiciones y habilidades que los kazajos han logrado conservar. Dependen de su clan y de sus rebaños, y a pesar de ser musulmanes siguen practicando rituales preislámicos de veneración del cielo, los antepasados y las fuerzas sobrenaturales de los espíritus buenos y malos.
Los asaro, llamados también la 'tribu de los hombres de barro'
Los asaro son una de las muchas etnias que pueblan las fértiles y frondosas selvas y valles de Papúa Nueva Guinea. Varias tribus ancestrales de gran diversidad antropológica han vivido dispersas por todo el país desde hace 1.000 años, organizadas en pequeños clanes agrarios, aisladas por el terreno áspero y divididas por sus idiomas, costumbres y tradiciones.
Los legendarios 'hombres de barro' asaro entraron en contacto por primera vez con el mundo occidental a mediados del siglo XX. Los asaro se aplican barro sobre el cuerpo y se ponen máscaras de barro para rememorar sus leyendas y aterrorizar a otras tribus.
Los maoríes
La larga y fascinante historia de los indígenas maoríes de Nueva Zelanda se remonta al siglo XIII en su patria mítica de Hawaiki, en Polinesia oriental. Siglos de aislamiento hicieron que los maoríes establecieran una sociedad con un arte característico y una lengua y una mitología únicas.
Los elementos definitorios de la cultura tradicional maorí incluyen el arte, la danza, las leyendas, los tatuajes y el sentimiento de comunidad. Algunos aspectos de su modo de vida han sobrevivido hasta el siglo XXI pese a la influencia de los colonizadores europeos que llegaron a sus tierras en el siglo XVIII.
Los masái
Cuando los masái emigraron de Sudán en el siglo XV, atacaron a las tribus que encontraban en el camino y capturaron su ganado. Al final de su viaje se habían apoderado de casi toda la tierra en el valle del Rift. Ahora viven en el sur de Kenia y el norte de Tanzania.
Ser un masái es sinónimo de haber nacido en el seno de una de las últimas grandes culturas guerreras. La vida de los masái ha dependido históricamente de su ganado, y desde tiempos ancestrales han seguido el curso de las lluvias por un vasto territorio en busca de alimento y agua. Hoy en día es común ver a jóvenes hombres y mujeres masái en las ciudades, vendiendo no solo cabras y vacas, sino también grano, carbón o teléfonos móviles.