Varios estudios han llegado a la conclusión de que la falta de sueño puede ser perjudicial para la salud, ya que dormir permite la recuperación del sistema cardiovascular. Si una persona no duerme lo suficiente tiene un mayor riesgo de sufrir enfermedades del corazón, lo que, a su vez, se traduce en diferencias en la esperanza de vida, escribe Quartz.
El año pasado los Centros para el Control de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés) revelaron que los afroamericanos dormían mucho menos que las personas de otras razas.
Según las investigaciones, en el país norteamericano los blancos duermen de media 6,1 horas, en comparación con las 5,1 horas de los negros.