Coca-Cola financia un estudio que afirma que las dietas son inútiles

El gigante de las bebidas azucaradas Coca-Cola promueve un estudio "con base científica", según el cual la cura para la epidemia de obesidad es preocuparse menos por contar calorías y más por hacer ejercicio.

Según un reportaje de 'The New York Times', Coca-Cola Company coopera con una organización que insta al público a mantenerse saludable no a través de dietas bajas en calorías y nutritivas, sino únicamente a través de mayor cantidad de ejercicio físico.

El medio precisa que el gigante de refrescos brinda apoyo financiero y logístico a la organización no lucrativa The Global Energy Balance Network (GEBN, por sus siglas en inglés), que a través de estudios y medios sociales promueve el mensaje de que el control de porciones y alimentos no es importante, sobre todo si uno permanece activo.

De acuerdo con el diario estadounidense Coca-Cola donó aproximadamente 1,5 millones de dólares el año pasado para el nacimiento de la organización sin ánimo de lucro. Otros cuatro millones de dólares han sido proporcionados desde 2008 para investigaciones de los fundadores de la misma Red. La página de GEBN (gebn.org) está registrada en la sede de Coca-Cola en Atlanta. La multinacional de bebidas, además, figura en la lista de los administradores de la página.  

En un video producido por GEBN, el vicepresidente de la organización y científico Steve Blair explica: "La mayor parte de la atención en los medios de comunicación populares y en la prensa científica ce centra en el 'oh, que están comiendo demasiado', culpando a la comida rápida, las bebidas azucaradas, etc. Y realmente no hay prácticamente ninguna evidencia convincente de que sea la causa".

Sin embargo, expertos en salud afirman que este mensaje es engañoso y parte de un esfuerzo de Coca Cola para desviar las críticas sobre el papel que las bebidas azucaradas han jugado en la propagación de la obesidad y la diabetes tipo 2. De esta forma, científicos de la Universidad de Carolina del Norte indican que la actividad física tiene un efecto mínimo en nuestro peso en comparación con lo que ingerimos. Por ejemplo, una lata de Coca-Cola contiene 140 calorías y alrededor de 10 cucharadas pequeñas de azúcar, lo que solo podría compensarse con una larga caminata de 5 kilómetros.