"Nos desnudaron para revisarnos. Ahí estaba esa monja con una gran olla que contenía una cosa blanca y una brocha. Nos pintó de pies a cabeza con una suerte de loción, por si teníamos piojos", contó a la BBC la autora del libro autobiográfico, que sufrió maltratos en un orfanato católico en los años 1960, cuando tenía entre 6 y 11 años.
"Luego nos llevaron a desayunar, y nos dieron avena. Pero era una avena con grandes grumos. Me dieron náuseas y vomité. Me sentí físicamente enferma. Y de repente me dieron un manotazo en la cabeza y escuché un grito que me dijo: '¡Cómetela toda!'", rememora.
Irene relató que una vez la llevaron a la guardería y ahí fue donde comenzaron a abusar de ella sexualmente. Llegó un momento en que la niña ya no podía aguantar más el dolor y decidió "meter los dedos dentro de un enchufe".
Según recuerda Irene, vio a un doctor cerca de su cama cuando despertó después del choque eléctrico. Cuando el médico le preguntó por qué lo había hecho, Irene le explicó que lo hizo por la crueldad y el dolor que había sufrido. Entonces una monja la interrumpió y le dijo al doctor: "Se lo dije, esa niña es un demonio. El diablo está dentro de ella".
La mujer, que esconde su entidad bajo el seudónimo 'Irene Kelly', ha explicado que la dura infancia que tuvo en la institución religiosa deformó su idea de lo que son una familia y una maternidad normal, lo que la llevó a años de apatía y depresión, aunque finalmente logró curarse gracias a los consejeros. "Han destruido la vida de tantas generaciones de niños. Nunca quise una familia, ni casarme o tener niños, porque para mí el mundo era un sitio cruel", dijo.
"Aún estoy aprendiendo a vivir con lo que pasó. Dios ha estado conmigo. Y tengo apoyo de consejeros. Todos los días tengo que vivir con esos recuerdos", aseveró la mujer. Irene confesó que los consejeros le ayudaron a soportar el dolor que la persiguió durante varias décadas. "Soy una sobreviviente, y me siento mucho mejor conmigo misma. Y a cualquiera que tenga miedo de confrontar lo que vivió le diría que es muy difícil empezar y toma mucho tiempo llegar a sentirse feliz, pero yo lo he logrado. Hoy me siento feliz".