Un nuevo informe de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, por sus sigla en inglés) ha comunicado que en el mes de octubre "se intensificaron" los enfrentamientos en el estado Unidad de Sudán del Sur, el país más joven del mundo, cuya independencia fue proclamada en 2011.
Tan solo en el municipio de Leer, desde el 4 al 22 de octubre se ha reportado la muerte de al menos 80 civiles, 57 de los cuales eran niños. También se ha reportado "el uso de la violencia sexual como arma de guerra", con más de 50 casos de violaciones registradas durante el mismo período.
Además, las regiones más afectadas por los combates experimentan una grave inseguridad alimentaria. Se estima que unas 40.000 personas en el sur y centro del estado Unidad pueden estar afrontando niveles catastróficos de inseguridad alimentaria y malnutrición desde octubre hasta diciembre de 2015. A nivel nacional, se estima que 3,9 millones de personas, lo que equivale a un 34% de la población, experimentaban una inseguridad alimentaria severa en septiembre de 2015, lo que supone un aumento del 80% en comparación con el año pasado.
El conflicto en Sudán del Sur comenzó en diciembre de 2013 y se trata de una intensa guerra civil entre el ejército regular, fiel al presidente Salva Kiir, y grupos rebeldes lideradas por su ex vicepresidente Riek Machar. El conflicto ha causado desplazamientos a gran escala debido a la violencia, altas tasas de muertes, enfermedades, lesiones, la interrupción de medios de subsistencia y una gran crisis de malnutrición.