Alepo es la 'capital comercial' siria, segunda, si no primera ciudad de importancia del país. Su toma por las fuerzas leales al Gobierno podría ser un punto de inflexión en la guerra siria.
En la prensa surgen especulaciones en torno a los acontecimientos y la situación real en la ciudad.
Les ofrecemos fragmentos de artículos del periodista ruso Piotr Dergachov, que conoce la situación desde dentro, publicados en el portal ruso Ruposters.
Los combates a gran escala estallaron en la ciudad en julio de 2012, cuando los combatientes de la oposición, anteriormente concentrados en zonas rurales, lanzaron una ofensiva contra Alepo.
Como resultado de los intensos combates en zonas urbanas, en la primavera de 2013 el Ejército y varios grupos terroristas y destacamentos considerados 'oposición moderada' por Estados Unidos y sus aliados ocuparon sus actuales posiciones.
¿Cómo son?
El Ejército se ha atrincherado en la parte occidental de la ciudad, que incluye la antigua fortaleza de Alepo, así como alrededor de la mitad de los suburbios. Los terroristas ocuparon los distritos del este de Alepo, recibiendo pertrechos desde Turquía, puesto que la ciudad se encuentra a solo 45 kilómetros de la frontera.
Las batallas se libraron solo en los suburbios industriales: esta táctica permitió al Ejército sirio formar un semicírculo alrededor de la cuidad en febrero de 2015.
¿Quién está luchando en Alepo?
Desde el inicio del conflicto, debido a la proximidad de Turquía, a Alepo concurrieron combatientes extranjeros, varios de ellos muy conocidos, sobre todo por los servicios de seguridad rusos.
Ahí empezó su 'trayectoria profesional' el 'ministro de Guerra' del Estado Islámico, Umar Shishani (nombre real: Tarhan Abu Omar al Shishani). Ahí peleó otro famoso señor de la guerra checheno: Abu Muslim Walid Shishani (Murad Margoshvili).
En Alepo, dirigió 16 asaltos de la prisión central de la provincia Seifullakh Shishani (Ruslán Machalikashvili).
El Frente al Nusra, otro conocido grupo extremista, libra combates activos en la ciudad. Sus comandos no solo operan en los alrededores de Alepo, sino también dentro de la urbe, moviéndose entre las bases en los suburbios y la línea del frente.
El Frente al Nusra (también llamado 'Jabhat al Nusra') tiene por objetivo establecer la ley coránica en los territorios bajo su control, aterrorizando también a las 300.000 personas que aún permanecen en Alepo, ciudad de unos tres millones de habitantes antes de la guerra.
El periodista resume que los que se enfrentan al Ejército sirio en la ciudad están lejos de ser 'opositores moderados' pese a que los destacamentos del Estado Islámico abandonaron la ciudad en la primavera de 2014. Se trata del ya mencionado Frente Al Nusra, el Frente Islámico, Ansar Ad Din y el Emirato del Cáucaso en Sham, todas estas agrupaciones son bastante comparables en crueldad con el Estado Islámico.
No obstante la presencia en el frente de destacamentos del Ejército Sirio Libre, también compuesto por islamistas radicales que cooperan con organizaciones del tipo Frente Al Nusra, no cambia este triste ambiente en la ciudad.
La situación humanitaria en Alepo
Los medios occidentales se han centrado en las últimas semanas en el hecho de que un desastre humanitario podría ocurrir en la zona de Alepo. "Pero este término ha caracterizado ya la situación en cualquier ciudad de Siria que haya vivido intensos combates. La misma catástrofe humanitaria ya ha ocurrido en Homs, Deir Al Zor y Alepo, y en muchos otros lugares", recalca el experto.
Las calles llenas de los escombros de edificios no es lo peor a lo que desde hace tiempo se enfrentan los habitantes de Alepo. "Durante los combates han sido destruidos parcialmente varios grandes sistemas urbanos: el de electricidad, agua y alcantarillado.
A partir de 2013 la electricidad está presente solo en algunas áreas de Alepo y con restricciones horarias. El suministro de agua es aún un lujo mayor en la actual Alepo que la electricidad. Una situación aún peor la atraviesa el sistema de saneamiento.
Sin embargo, los alimentos son suministrados a la ciudad pero a precios bastante caros debido a los costos asociados con el riesgo.