'Ayer me mataron', dura carta contra la violencia de género sobre las viajeras argentinas asesinadas
Con una conmovedora carta escrita en primera persona en memoria de las turistas originarias de la provincia argentina de Mendoza asesinadas en Ecuador a finales del mes pasado, Guadalupe Acosta, estudiante paraguaya de Ciencias de la Comunicación, ha revolucionado las redes sociales y ha animado a alzar la voz contra el machismo y la violencia contra las mujeres, informa 'El País'. El escrito ha sido compartido en Facebook más de 585.000 veces.
"Me negué a que me tocaran y con un palo me reventaron el cráneo. Me metieron una cuchillada y dejaron que muera desangrada", comienza diciendo la misiva aludiendo a la manera en la que fallecieron las dos jóvenes. "Pero peor que la muerte, fue la humillación que vino después. Desde el momento que tuvieron mi cuerpo inerte nadie se preguntó dónde estaba el (palabra malsonante) que acabó con mis sueños, mis esperanzas, mi vida. Más bien empezaron a hacerme preguntas inútiles (...) ¿Qué ropa tenías? ¿Por qué andabas sola? ¿Cómo una mujer va a viajar sin compañía? Te metiste en un barrio peligroso, ¿qué esperabas?", prosigue.
Acosta hace referencia también a quienes cuestionan a sus padres "por darme alas, por dejar que sea independiente, como cualquier ser humano". "Les dijeron que seguro andábamos drogadas y lo buscamos, que algo hicimos, que ellos deberían habernos tenido vigiladas", escribe.
"Y solo muerta entendí que no, que para el mundo yo no soy igual a un hombre. Que morir fue mi culpa, que siempre va a ser. Mientras que si el titular rezaba fueron muertos dos jóvenes viajeros la gente estaría comentando sus condolencias y con su falso e hipócrita discurso de doble moral pedirían pena mayor para los asesinos. Pero al ser mujer, se minimiza", denuncia la carta.
Asimismo, también se ha vuelto viral otra publicación que hace referencia al tratamiento mediático que ha tenido este espeluznante asesinato. "Las mochileras asesinadas en Ecuador, para los medios masivos de comunicación, 'viajaban solas'. Eran dos mujeres, mayores de edad, viajando juntas. Pero sin embargo estaban 'solas'. ¿Solas de qué? ¿Falta de quién? Eran dos. Pero como nacieron mujeres, ser dos no les alcanzó. Para no ser 'solas', algo les faltaba… Adivinen qué", escribe Cosecha Roja, la Red Latinoamericana de Periodismo Judicial.