"Ella no volverá, pero no dejo de ir al aeropuerto": Rostov y Dubái lloran por el FZ981

Los vecinos de la ciudad rusa de Rostov del Don siguen llevando flores al edificio del aeropuerto local en memoria de las víctimas de la catástrofe aérea del Boeing 737-800 de la aerolínea Flydubai que se estrelló este viernes cobrándose la vida de sus 62 ocupantes.

Junto con las familias de los fallecidos que están sufriendo su pérdida trágica dos ciudades lejanas, Rostov del Don, en el sur de Rusia y Dubái, EAU, se encuentran en estado de 'shock' tras la catástrofe, recordando a sus amigos y colegas.

"Mi amiga, con quien trabajé, murió en este accidente. Como la mayoría [de personas a bordo del avión accidentado], ella regresaba de vacaciones. Un día antes de su vuelo de regreso, ella me envió imágenes, se veía tan feliz en ellas. Era una persona tan radiante y amable. Era como un sol, a pesar de no haber tenido la vida más fácil. Ella perdió a su marido, y ahora su hijo perdió también a su madre. Todos estamos llorando, todavía no lo podemos creer", comentó a RT Tatiana Sergienko, devastada por la pérdida de su amiga. "Duele tanto. He estado viniendo al aeropuerto desde hace dos días. Todavía tengo alguna esperanza, aunque mi mente me dice que no va a regresar", dijo la mujer llorando.

Un raro fenómeno natural podría ser la causa del accidente de Flydubai

En Dubái, desde donde el Boeing se dirigió a Rostov del Don, el accidente ha sido como "una sacudida eléctrica para toda la comunidad rusa", dijo Elvira Richards a RT. "Tenía mucho miedo de mirar la lista de pasajeros, ya que entendía que iba a conocer a alguien a bordo. Y descubrí que un buen número de personas que conocían mis amigos estaban en ese vuelo", dijo.

Un capitán de Flydubai, Sasha Khamnev, apenas conocía a los pilotos del vuelo fatal FZ981, pero, sabiendo que él mismo podría haber estado en su lugar, ha puesto en marcha una campaña para recaudar 150.000 dólares para las familias de la tripulación fallecida. "Yo le había dado la mano en la sala de la tripulación como siempre lo hacemos porque sentimos que hay algo que nos une, pero no lo conocía en absoluto (...) Pero eso no importa en el mundo del pilotaje (...) nos sentimos como una gran familia", dijo Khamnev a RT.