El Senado de EE.UU. ha aprobado este martes una ley de defensa que contempla un presupuesto de 602.000 millones de dólares y contiene una enmienda que podría requerir que las mujeres participen en el servicio militar.
"A principios de este año se realizó un cambio drástico en las políticas militares de la nación que abrió casi todos los puestos de combate a las mujeres", comenta en un artículo para el portal She Knows la bloguera y feminista Amy Vowles.
"La siguiente pregunta era: si las mujeres tienen derecho a participar en todas las funciones de combate, ¿debe el reclutamiento ser obligatorio para las mujeres también?", se plantea la autora del artículo para agregar que, con la aprobación de esta nueva ley en el Senado, "ahora estamos mucho más cerca de que esto se haga realidad".
Según Vowles, aunque algunas feministas aclaman la nueva ley como "un favor hacia su causa" y un "gran avance" hacia la igualdad en EE.UU., "ser feminista no tiene por qué significar que estés a favor de que envíen a nuestras hijas a la guerra".
"Soy feminista, y no apoyo la inclusión de las mujeres en el servicio militar", destaca la autora.
En este sentido, explica que "cuando no estás incluido en algo que nadie quiere hacer –en este caso, ir la guerra– no es discriminación: es un privilegio", y, aunque hay quienes dicen que las mujeres deben renunciar a ese privilegio en nombre de la igualdad, "pero es que de eso se trata la igualdad: los hombres y las mujeres no son iguales", afirma Vowles.
Cuando no estás incluido en algo que nadie quiere hacer –en este caso, ir la guerra– no es discriminación: es un privilegio
"Así es: soy feminista, soy madre de dos niñas, y estoy diciendo que los hombres y las mujeres no son iguales", señala.
La autora basa su posición en que las mujeres son por naturaleza físicamente diferentes de los hombres, por lo cual, el combate "no es una situación de igualdad de oportunidades para hombres y mujeres". Estudios del propio Ejército de EE.UU. han demostrado que las mujeres tienen una tasa de lesiones más de dos veces mayor que sus homólogos masculinos en el entrenamiento de combate.
"Podemos apoyar a nuestras hermanas en las Fuerzas Armadas sin someter al resto de la población civil femenina al servicio militar obligatorio", concluye la autora.
Opiniones divididas
Mientras la ley fue aprobada con 85 votos a favor y 13 en contra, algunos senadores se opusieron a la enmienda sobre el reclutamiento de las mujeres.
Así, el senador republicano por Texas Ted Cruz desaprobó la iniciativa la semana pasada diciendo: "Le encuentro muy poco sentido o incluso ninguno a la idea de que debemos reclutar a la fuerza a jóvenes mujeres para el combate", según lo cita la CNN.
Otros, como el senador republicano por Arizona John McCain, defendieron la medida diciendo que después de que el Pentágono abriera todos los puestos militares a las mujeres sería "sencillamente justo" incluirlas en el servicio militar.